Ana Rosa Quintana fue la persona escogida para ocupar el lugar de 'Sálvame'. La presentadora llegó a las tardes con 'TardeAR', un espacio con el que la cadena pretendía dar una vuelta de tuerca a su programación con un programa más familiar. La apuesta no ha conseguido los resultados esperados.

Aunque el formato cambió, Telecinco quiso apostar por el mismo plató en el que cada tarde, durante 14 años, Jorge Javier y sus colaboradores regalaban bombazos y entretenimiento a los espectadores. Una decisión que no pareció hacer demasiada ilusión al equipo.

Kiko Hernández ha desvelado en 'Ni que fuéramos' que el equipo de 'TardeAR' puso en marcha un ritual para limpiar el plató después de su salida de la cadena."Cuando nos fuimos hicieron una gran obra. Y Cristina Tárrega dijo: 'este sitio está maldito y hay que santificarlo'”.

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Matamoros aseguró también que desde 'TardeAR' llevaron “a gente para echar cosa” para poder pasar página definitivamente. En concreto, echaron "agua bendita" por la estancia.

"Mira cómo les ha ido... no hicieron buen trabajo”, comentó Kiko Hernández lanzando una sentenciadora pulla con la que recuerda que las audiencias que está cosechando el programa de Ana Rosa están bastante lejos de las que hacían ellos incluso en su etapa final en 'Sálvame'.