La Fiscalía pide limitar la Navidad en Vigo: “Un ruido difícilmente soportable”

El pasado mes de junio, el juzgado de lo Contencioso Administrativo 1 de Vigo desestimó una demanda interpuesta por una vecina de la ciudad contra el Ayuntamiento olívico, por los perjuicios que le causaron los ruidos derivados del mercadillo navideño y las atracciones instaladas en el entorno de la calle Areal, entre noviembre de 2022 y enero de 2023.

Vulneración derechos fundamentales

La demandante acusaba, sin éxito, al Concello de haber vulnerado sus derechos fundamentales y no haber actuado frente a una reclamación para garantizar esos derechos (a la intimidad y a la inviolabilidad del domicilio). La sentencia no era firme y contra ella cabía recurso de apelación. La perjudicada interpuso dicho recurso al que se acaba de adherir la Fiscalía entendiendo que sí se han vulnerado dichos derechos fundamentales y solicitando se imponga a la administración local “las medidas necesarias para evitar la reiteración de su conducta lesiva”.

No es una celebración puntual

El Ministerio Público comparte el criterio expuesto por la mujer afectada, en cuanto “se ha producido una exposición continuada en el tiempo a niveles de ruido difícilmente soportables”. Igualmente, no comparte el criterio del órgano juzgador en primera instancia sobre la temporalidad de fichas celebraciones. “Recordamos que la fecha de inicio del mercado navideño así como de las atracciones es desde el 20 de noviembre de 2022 hasta el 17 de enero de 2023, no pudiendo compartir el criterio [...] de que se tata de una celebración puntual con una extensión temporal predeterminada”, esgrime en su respuesta al recurso de apelación.

Los argumentos que aporta la Fiscalía para determinar su posicionamiento parten de las mediciones realizadas en el exterior de la vivienda de la demandante, que “superan los niveles máximos permitidos tanto por la legislación como por las directrices marcadas por la Organización Mundial de la Salud”.

Medidas "ineficaces"

De igual modo, el Ministerio Fiscal reconoce que tras la emisión del estudio de impacto acústico relativo a la campaña de Navidad 2022-2023 en el que se concluía que se superarían los objetivos de calidad acústica entre las 19.00 y las 24.00 horas, se tomó, por parte del Concello, algunas medidas al respecto: se suprimió la megafonía en determinadas horas, se redujo el volumen general, se reorientaron altavoces... sin embargo, los resultados no fueron los esperados. “No es menos cierto que dichas medidas no resultaron realmente eficaces. Por ello no cabe sino derivar que no se ha procedido por parte del Concello a la adopción de las medidas precisas para la efectiva y real vigilancia, control y corrección de los ruidos que exceden de los límites tolerables”, esgrime.

Por todos estos argumentos, entiende la Fiscalía de Vigo que queda “suficientemente acreditada” la vulneración del derecho fundamental a la intimidad y a la inviolabilidad del domicilio al entender que ciertos daños ambientales “pueden atentar contra su derecho al respeto de su vida privada y familiar privándola del disfrute de su domicilio”.

Trascendencia "indiscutible"

Y es que ante todo, reconoce la Fiscalía que es “indiscutible la transcendencia de las fiestas navideñas de la ciudad de Vigo”, sin embargo el derecho a celebrarlas “no puede ser un obstáculo para que los tribunales reconozcan la prevalencia del derecho al descanso, a la tranquilidad, al disfrute del domicilio frente al derecho al ocio y a sus distintas manifestaciones”: “No se trata de acabar con las fiestas pero sí de ponerles límites para regularlas de manera que su ejercicio se efectúa del modo que menos perjudique a terceros”, recalca.

Así, valora que las actividades pueden celebrarse sin causar a los vecinos otras molestias que las inevitables, para lo cual “debería haber ejercido el control adecuado”, por parte del Concello, “buscando un nuevo emplazamiento”, que es lo que reclama en su recurso, así como una indemnización a la demandante de 1.640 euros.

El Concello creó una comisión para paliar los problemas acústicos

En pleno mes de agosto el Concello perfiló las fiestas de Navidad bajo la dirección del “comité especial” presidido por la primera teniente de alcalde Carmela Silva y que tendrá dos objetivos: Dispersar la Navidad por el conjunto de la ciudad y minimizar sus efectos colaterales. Así lo ratificó Abel Caballero tras la primera reunión , en la cual pudo adelantar los primeros compromisos. Y es que el alcalde ya ha fijado algunos “emplazamientos adicionales” para los adornos y atracciones que atraen a miles de visitantes a Vigo desde noviembre a enero, evitando así las grandes aglomeraciones en la “gran manzana navideña” que se extendía por el centro y garantizando el acceso a garajes y aparcamientos en las zonas donde se dispongan las atracciones.