Vigo se aferra al sueño del Mundial 2030

La organización pide concreción en la financiación de Balaídos para mantenerla como duodécima candidata a una de las once sedes

Gijón y Murcia se han caído; también Valencia pero aún puede haber cambios

Balaídos, ayer, durante los trabajos de cambio de césped

Balaídos, ayer, durante los trabajos de cambio de césped / Marta G. Brea

Armando Álvarez

Armando Álvarez

Vigo sigue en la pelea por el Mundial de 2030, aunque en situación comprometida. La comisión directiva de la organización y representantes del Gobierno se reunieron ayer en Madrid. Sobre la mesa, las puntuaciones de quince propuestas, con solo once sedes a repartir. De la carrera se han caído El Molinón (Gijón), La Nueva Condomina (Murcia) y el Nuevo Mestalla (Valencia). Se han aprobado once opciones.

Balaídos figura aparte, en una especie de limbo. Mantendrá su candidatura si resuelve determinadas deficiencias, especialmente en cuanto a la financiación. Mañana, en una reunión en Agadir, España, Portugal y Marruecos habían planeado cerrar el cupo. La documentación debe remitirse a FIFA antes del 31 de julio. En todo caso, varias fuentes consultadas aseguran que la nómina definitiva aún podrá experimentar en el futuro más variaciones de las previstas.

El programa del Mundial ha sufrido ya muchas convulsiones desde que España tomó la delantera. Fue inicialmente un tándem ibérico. Ucrania compareció brevemente, por empatía política, antes de desaparecer. Marruecos se unió definitivamente para granjearse el voto africano. La FIFA anunció la designación de los tres países en octubre de 2023, pero con partidos inaugurales en Argentina, Paraguay y Uruguay.

Baile de sedes

También se inició de manera inmediata el baile de sedes. Solo Portugal ha clarificado desde el inicio que Alvalade y A Luz, en Lisboa, y O Dragao, en Oporto, serán sus estadios. Marruecos, que tendrá finalmente seis, ha maniobrado para disfrutar de rondas importantes. España, tras tanta ebullición, ha concretado que tendrá once sedes. Y al examen de esta semana habían llegado quince.

En la reunión celebrada ayer, los comisionados federativos detallaron los informes que han elaborado tras visitar cada campo y ciudad. Diversos problemas han provocado la eliminación de Molinón, Condomina y Mestalla. Han pasado el corte Camp Nou, Cornellá, San Mamés, Reale Arena, Santiago Bernabéu, La Cartuja, Metropolitano, La Romareda, La Rosaleda, Gran Canaria y Riazor. Vigo tiene su propia catalogación.

La contienda estatal ha tenido su propia traslación a Galicia desde el momento en que quedó más o menos asegurado que habría al menos una sede. Balaídos partió con ventaja en el inevitable pulso con Riazor. Ninguno de los dos estadios cumplía el requisito del aforo mínimo. Pero al menos el vigués ya había avanzado en su reforma, lo que reducía costes. El anuncio de que la Xunta aportaría dinero varió el escenario. En A Coruña han presentado una remodelación –hasta los 48.000 espectadores– que alcanzará los 101 millones. En ese plan, la Xunta paga el 40% y una entidad privada, el 30%. El resto se reparte entre diputación y concello.

Vigo tendría que acometer la ampliación de Balaídos, además de reconstruir Gol. El concello ha estimado el coste entre 60 y 75 millones. La comisión consideró ayer que debe concretar mejor la financiación, que se adjudica a la Xunta en un 50%, a la Diputación de Pontevedra en un 35% y a las arcas municipales en un 15%. También ha jugado en contra, en términos de sostenibilidad, que se necesita realizar obras en una grada como Tribuna, ya recientemente reformada.

La candidatura viguesa debería mejorar en estos conceptos en las próximas horas para que España llegue mañana a esa reunión en Agadir aún con doce opciones. No parece probable que se puedan subsanar a tiempo. En todo caso, los expertos apuntan a que nada será definitivo durante mucho tiempo.

Entienden que Valencia, la tercera ciudad de España, en algún momento resucitará una apuesta que ha frenado el dueño del club referente, Peter Lim. Hay dudas sobre la viabilidad de Málaga, con un presupuesto de 280 millones para La Rosaleda. Y se debate la conveniencia de que Barcelona disponga de dos sedes. Así que ni siquiera se puede descartar que Vigo y A Coruña cohabiten en el Mundial.

La propia España, en riesgo

En realidad, lo que está incluso en cuestión es que España vaya a organizar ese Mundial de 2030, según informa Jordi Gil. El presidente de la Federación Española, Pedro Rocha, para quien han pedido seis años de inhabilitación ante el Tribunal Administrativo del Deporte, solo se desplaza puntualmente a los partidos de la selección, abordando todas las cuestiones federativas y una de las principales es mantener la excelente relación con la FIFA y la UEFA.

Como telón de fondo principal está que el Mundial 2030 en España no corra peligro debido a las injerencias del Gobierno, algo que no tolera para nada la FIFA. La RFEF hablará hoy jueves por vía telemática con este organismo para evitar que la situación pase una factura muy alta.