A 2.000 metros de altitud en el límite entre las provincias de Ourense y León, entre montañas colmadas de nieve en invierno y laderas escarpadas e inaccesibles, se ha descubierto esta semana el mayor conjunto de pintura esquemática prehistórica de Galicia. Es uno de los conjuntos pictóricos más importantes del noroeste peninsular. En una cueva de Casaio, en Carballeda de Valdeorras, investigadores que rastreaban un refugio de guerrilleros antifranquistas hallaron en una cueva una quincena de pinturas del III Milenio antes de Cristo -con entre 4.000 y 5.000 años de antigüedad-, en buen estado de conservación.

El equipo investigador, en los montes de Casaio. // Cedida

El hallazgo de esta muestra de arte rupestre, confirmado por la Dirección Xeral de Patrimonio Cultural, se convierte automáticamente en un Bien de Interés Cultural (BIC). Un proyecto determinará la datación y el estado de las obras prehistóricas, y además explorará la zona dada la convicción por parte del equipo de que otras grutas de la montaña entre Ourense y León guardan más tesoros milenarios.

"Empezamos a ser conscientes de la importancia del hallazgo al divulgarlo. Sientes alegría y emoción. Las comunidades de esta zona tenían la misma entidad religiosa que las de franjas de la Vía de la Plata y la Meseta. Esto suma a Galicia a esta corriente, demuestra una realidad cultural similar. Existen paralelos muy parecidos en Cuenca", describe el arqueólogo Francisco Alonso, de Estela Arqueoloxía e Patrimonio.

El proyecto relacionado con el análisis arqueológico de la guerrilla antifranquista y de la minería del wolframio en la zona de Casaio que ha conducido a este descubrimiento histórico se llama "Sputnik Labrego". Lleva dos años en marcha y está dirigido por el doctor en Arqueología Carlos Tejerizo, del Instituto de Ciencias del Patrimonio, adscrito al CSIC, y Alejandro Rodríguez, de la Universidad de Santiago de Compostela. La localización de la cueva, en una zona casi inaccesible, fue posible gracias a la colaboración de los vecinos y de la comunidad de montes de Casaio. "Estamos muy agradecidos, especialmente a Francisco Álvarez y César Real. Sin el conocimiento exhaustivo del territorio por parte de la comunidad local hubiera sido imposible localizar este conjunto", afirman.

Al acudir a principios de esta semana a documentar y catalogar el chozo de una guerrilla antifranquista -no facilitan la ubicación de la gruta por prudencia, en aras de su protección-, Francisco Alonso constató que las condiciones de la cueva -una cavidad en gran pendiente, de unos 10 metros de profundidad, con luz natural y huellas de lobo-, grande y con paredes rectas de piedra caliza, "eran ideales para la presencia de este tipo de arte".

El equipo de investigadores, del que también forman parte Mario Fernández (USC), Laura Martínez (Patrimonio Minero del Noroeste Peninsular) y Celtia Rodríguez (USC), empezó a revisar los muros de la gruta y lo primero que encontraron fue un ídolo oculado. "Es fantástico, el primero documentado en Galicia". Este tipo de representaciones de la época Calcolítica -el periodo histórico anterior a la Edad de Bronce- existen en lugares como Extremadura, Andalucía o el norte de Portugal. "Solo hay tres puntos con arte esquemático en Galicia: Baleira, en Lugo, descubierto hace dos años; Vilardevós, en Ourense, localizado el pasado, y ahora Casaio. La importancia de este panel es enorme, más amplio y más rico", destaca Alonso. También aparecieron en la cueva soliformes. El equipo documentó las pinturas y, para facilitar su comprensión, difundió la foto original de dos obras junto a la imagen digital tratada mediante filtros y coloraciones en Photoshop para que, con el contraste de colores, los trazos prehistóricos destaquen más a simple vista.

Algunos vecinos de la zona refirieron a los investigadores recuerdos desde la infancia sobre la existencia de pinturas, pero hasta ahora no se había constatado su importancia patrimonial y cultural, ni tampoco la antigüedad de varios milenios. "Avisamos a la Dirección Xeral y enviaron a un experto. José Manuel Rey, especialista en arte rupestre y director del Parque Arqueolóxico de Campolameiro (Pontevedra), dependiente de la Dirección Xeral de Patrimonio Cultural, confirmó la importancia del hallazgo y que hay cerca de una quincena de pinturas, siendo conservadores", cuenta el profesor Carlos Tejerizo. "El siguiente paso es hacer el trámite administrativo para el inventariado de Patrimonio. Se convertirá en BIC debido a su entidad. Después se elaborará un proyecto integral y multidisciplinar en el que podamos abordar con el mayor número posible de especialistas la datación específica, el estudio del óxido y de las bacterias en relación a la conservación, así como la prospección intensiva de la zona, en busca de más vestigios, pues todo parece indicar que no se trata del único conjunto presente en el paisaje. Estamos hablando de un caso singular, único en el contexto de Galicia. Su entidad es única", resalta el experto.

¿Habrá visitas?

La joya patrimonial descubierta, ¿podrá ser visitada por el público? "La intención es que se ponga en valor lo antes posible. Es muy importante a nivel patrimonial, pero su apertura dependerá de cómo se desarrolle el proyecto", opina Carlos Tejerizo. "Podrían ser visitadas siempre con el criterio técnico y de Patrimonio", expresa Francisco Alonso. La cueva que guardaba el tesoro se encuentra "en un entorno muy bonito, con una cascada que justo cae delante. La calidad y riqueza de las pinturas indica que es posible que en la zona, con muchos más abrigos por su geología y su carácter inaccesible, haya otras cuevas con vestigios. La prioridad ahora es conocer el estado de conservación y abarcar la zona de manera global, respetándola".