La Xunta opta por una oferta de 5,7 millones para la reforma integral de la PO-546 entre Praceres y Mollavao

Seleccionada la empresa para ejecutar las obras, que incluyen una senda peatonal y completarán las mejoras ya hechas en Estribela

Estado de las obras del aparcamiento en Lourizán después de tres meses de trabajos.

Estado de las obras del aparcamiento en Lourizán después de tres meses de trabajos. / Rafa Vázquez

La Consellería de Vivenda e Planificación de Infraestruturas ya ha seleccionado a la empresa que ejecutará una de las actuaciones viarias más destacadas de los últimos años en el municipio: la reforma integral de la PO-546 (la carretera vieja de Marín) entre Praceres y Mollavao. A falta de completar los trámites administrativos y certificar la adjudicación, la oferta elegida entre las trece disponibles es la de Seranco-Oresa, con un presupuesto de 5,73 millones, medio millón medios de la cifra inicial.

Una de las actuaciones más destacadas es la ejecución de una senda que unirá Pontevedra con Marín con un itinerario de 3,5 kilómetros de longitud por el margen derecho de la PO-546, con un ancho que oscila entre los 2,5 y los 4 metros, que se complementará con un aparcamiento, un mirador y un parque infantil. Con la ejecución de esta obra se completará la “humanización” de este vial, después de los trabajos ya ejecutados en Estribela, en el tramo más urbano de la carretera. En este caso la inversión fue de 1,35 millones de euros, lo que supone “una mejora radical con respeto a lo que había anteriormente”, según explicó la conselleira María Martínez Allegue, en una reciente visita a la zona.

La actuación en los 3,5 kilómetros pendientes, que cuenta con un plazo de ejecución de 18 meses, prestará especial atención a la seguridad y obligará a reducir la velocidad de los vehículos, gracias a la glorieta que se construirá a la altura del Centro de Investigaciones Forestales de Lourizán. Esta glorieta facilitará, además, el cambio de sentido de los vehículos que proceden de Marín y que quieren acceder al aparcamiento disuasorio, tipo carpooling, que se ejecuta muy cerca del acceso al Pazo de Lourizán

En la obra se incluirá la mejora también de las paradas de transporte público, así como en la renovación de la iluminación del trecho y la construcción de dos pasarelas, una de más de 120 metros sobre el río de Louriñas y otra de 45 metros sobre O Sartán.

También se ejecutarán muros de sostenimiento, necesarios por la cercanía de la vía del ferrocarril en algunas zonas, prolongando los ya existentes para poder lograr un ancho de senda adecuado y obtener zonas amplias en las que se prevé la instalación de un parque infantil. La intervención se completa con la dotación de zonas de ocio, destacando la habilitación de un mirador, en el punto kilométrico uno, aprovechando el espacio inutilizable en el margen derecho de la calzada, con un pequeño parque infantil y zona verde

A solicitud de los vecinos A Sartán, se incorpora en la actuación una nueva zona de aparcamiento en línea entre los puntos kilométricos 3,300 y 3,350, con la reserva de una plaza para una persona con movilidad reducida.

Escasos avances en el parking disuasorio

La Xunta comenzó en abril las obras del aparcamiento disuasorio en la carretera PO-546 en Lourizán, con una inversión de 350.000 euros en una parcela de 2.465 metros cuadrados. Pero desde entonces, los avances parecen escasos. El equipamiento se sitúa entre el acceso al Pazo de Lourizán y la intersección con el núcleo de O Rozo. “Se trata de un emplazamiento estratégico en la comunicación entre Pontevedra y O Morrazo, por lo que el aparcamiento facilitará tanto el uso del vehículo compartido cómo del transporte público”, expone la Xunta. Se habilitarán 71 plazas, de las que dos se reservan para personas con movilidad reducida. El parking se integrará en la senda prevista a lo largo del vial.

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