La caída de la natalidad se agrava en la ciudad: 38 nacimientos cada mes, la mitad que en 1985

Pontevedra tuvo en 2023 el segundo peor saldo vegetativo desde que hay registros ya que se atenuó algo la cifra de defunciones | El municipio suma tres años sin crecer la población

Varios niños juegan en Campolongo.

Varios niños juegan en Campolongo. / Gustavo Santos

N. Davila

La sangría demográfica no cesa en la ciudad y ni siquiera el fenómeno de la inmigración (todavía positiva) parece ser suficiente para ponerle freno. Pontevedra registró el año pasado su peor dato en el número de nacimientos. Concretamente, en el municipio en 2023 nacieron 457 personas, 16 menos que en el ejercicio anterior. La cifra de fallecimientos sí se atenuó algo, con 820 defunciones (35 menos que en 2022) lo que deja un saldo vegetativo de -363, según revelan los datos publicados ayer por el Instituto Galego de Estatística (IGE). Es el segundo peor balance desde que hay registros, solo superado por el -382 de 2022.

Con una media de 38 partos al mes a lo largo del pasado año, no hay constancia de un ejercicio peor en la ciudad, que se resiente en su padrón de habitantes. Es la mitad de nacimientos que hace cuarenta años. En 1985 hubo 914, es decir, 76 al mes. El municipio registra desde hace tres años caídas en su padrón oficial. Ahora es de 82.535 habitantes, cuando en 2020 se alcanzó el récord hasta ahora de 83.260. Desde entonces, el censo cae a razón de 240 vecinos al año.

Las estadísticas de Movimiento Natural de la Población de 2023 elaborados por el IGE indican que el año pasado los nacimientos descendieron un 3,4% en Pontevedra, con 16 bebés menos que en 202, frente a 820 defunciones. Si se comparan los datos con el año de la pandemia, son todavía peores, con una caída de los nacimientos de casi un 14% (72 bebés menos) y un aumento de los fallecimientos de un 4%.

El crecimiento vegetativo (la diferencia entre nacimientos y fallecimientos) cae progresivamente en Pontevedra desde el año 2013. Entonces se registró el último aumento, al pasar de una diferencia positiva de 46 en el año 2012 (con 744 nacimientos y 698 muertes) a una de 88 en 2013 (con 750 bebés y 662 fallecimientos).

Con respecto a ese año, los nacimientos han caído casi un 40% (287 bebés menos) y las defunciones han aumentado casi un 25%(158 más). El año 2014 fue el último en el que se registró una cifra positiva: +15, con 685 nacimientos y 670 defunciones. En 2015, este indicador fue negativo por primera vez desde 1998: -3, con 679 bebés y 682 muertes registradas en la ciudad. En 1998 el crecimiento vegetativo en Pontevedra fue de -24 (con 615 nacimientos y 639 muertes), como también lo fue en 1996: -51 (con 609 alumbramientos y 660 defunciones).

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