La moción contra Jácome fracasa al negarse el PP a “seguir participando en este circo”

-El grupo popular calificó de “tomadura de pelo” la invitación del PSOE, a horas vista del pleno para “cerrar” la censura

-Los populares no no irá a más debates ”si el BNG no levanta el veto”

-El Bloque dice que el PP "nunca quiso apoyar la censura al alcalde

-La emoción mató la moción: los intereses políticos y personales que frenan el acuerdo

El grupo municipal del PP, ayer, en la conferencia de urgencia en la sede del partido. |   // FDV

El grupo municipal del PP, ayer, en la conferencia de urgencia en la sede del partido. | // FDV

M.J.Álvarez

Las declaraciones del presidente del PPdeG, Alfonso Rueda, en las que calificaba de “postureo” el intento de moción de censura contra el alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, y en las que señaló que veía “muy difícil” que este acuerdo prosperase, alcanzaron ayer carta de legalidad, al anunciar el grupo municipal del PP, en una rueda de prensa de urgencia, que declina asistir a la invitación que le hizo el PSOE a primera hora de la mañana de ayer, de nuevo por correo, para “cerrar” ese acuerdo de censura, invitación que calificaron de “tomadura de pelo” por la premura y que no aceptarán, hasta que exijan al el BNG a que levante “los vetos” a un posible cogobierno en Ourense con el Partido Popular

El segundo intento de la oposición municipal, en los cinco años de Gobierno Jácome en el Concello por quitarlo de la Alcaldía, alegando un concello y servicios sociales en bancarrota, no solo no tiene visos de prosperar, sino que ha convertido las relaciones entre los grupos de oposición necesarios para que esa moción prospere, PSOE, PP y BNG, en un polvorín. Pese a todo señaló que “no se cierran las puertas”

El PP ve el debate “un circo”

Una invitación, cursada a las 8.30 de la mañana de ayer por el grupo socialista, en el que invitaba al PP a cerrar esa moción contra Jácome en un encuentro que debía de celebrarse hora antes del pleno ordinario del viernes, provocó esa comparecencia de urgencia en la sede del PP en Ourense, y con los 7 ediles del grupo popular al completo, en la que la coordinadora del equipo popular en el Concello, y diputada Noelia Pérez se preguntó “¿a qué juega el grupo socialista?”, señaló que u partido “no participarán más de este circo” y no acudirán a nuevas reuniones de debate de censura, en tanto el BNG no levante ese veto por el que solo apoyarán la moción, si el alcalde saliente es del PSOE. Esto impide cualquier tipo de acuerdo de rotación en la Alcaldía con el PP.

Noelia Pérez se preguntó también si “hay algún tipo de conchabeo entre PSOE y BNG” y si ambos están manteniendo “reuniones paralelas”, pues en la segunda, y por ahora última reunión de los tres grupos, el representante del BNG José Manuel Puga, ya adelantó que los nacionalistas dejaban por escrito la firma de uno de sus 4 concejales, el voto necesario para conseguir los 14 apoyos de la mayoría absoluta, imprescindibles para firmar una moción de censura contra Jácome.

Las “prisas” del PSOE

Noelia Pérez insistió en que una moción “tiene que tener un carácter constructivo, no es quitarte tú para ponerme yo”, y repitió su ejemplo doméstico de que “esto es como una pareja que se quiere casar, pero antes tiene que ver si coinciden sus posturas, y son capaces de entenderse”.

Criticaron además las “prisas” del PSOE y la hoja de ruta que ha seguido el Partido Socialista, desde el primer momento que intentó llevar adelante esta opción. Así la coordinadora del PP, lamentó que “de forma unilateral” la portavoz del grupo municipal “se nombró a ella misma candidata sin tener conversación previa con el PP”, señala.

Tampoco saben qué postura tiene al respecto de esta operación el número 1 y candidato del PSOE, Francisco Rodríguez “que lleva casi un año sin asistir a los plenos, cuando se le ve por la calle”.

En este clima de crisparon nada proclive par que prospere una moción el PP remata señalando que el PSOE debe exigir al BNG que levante vetos. Luego verán si vuelven al debate de moción.

“El PP no quería la moción”, según el BNG

Desde el Grupo municipal del BNG e reafirman su compromiso con la moción de censura propuesta y cuyo objetivo es que Gonzalo Pérez Jácome deje de ser Alcalde. Su portavoz municipal Luis Seara recuerda que, “en la última reunión mantenida, el BNG dejó su firma en un documento-propuesta de moción de censura, esperando por las otras trece necesarias para que prospere, siete del PP y seis del PSdeG-PSOE”, y añade, “siempre nos mostramos dispuestos, después de la moción de censura, trabajar a favor de la ciudad y de su gobernabilidad”.

Seara tiene claro que “el PP nunca quiso censurar a Jácome, pues es con él con quien firmaron en 2019 y en el 2023”. Desde la formación nacionalista, lamentan que una vez más “se habían creado falsas expectativas en buena parte del vecindario “dado que el PP nunca tuvo voluntad de que la moción prosperara. Nosotros fuimos muy claros desde el primer momento entretanto que el PP, el único que hizo, al igual que en el mandato pasado, fue a poner excusas constantemente, excusas que por cierto, se asemejan mucho a eso del que tanto se quejan, líneas rojas”.

El portavoz nacionalista adelanta que “desde el BNG, seguiremos trabajando a destajo a favor de los vecinos y de los intereses de Ourense, ofreciendo una alternativa real, seria y rigurosa” al tiempo que augura que, “conociendo al Partido Popular, volverán a salir al rescate de Jácome cuando sea preciso y no tardaremos mucho en verlo”, asegura.

La emoción (por el poder) mató la moción

Cuando un líder de partido como Rueda, conciso y poco dado a retóricas, tachó la moción de “postureo” y aseguró que veía “muy difícil” que salga adelante, no estaba haciendo predicciones amorosas, –por mucho que se declare divertido seguidor de Firts Dates–, si no marcando una hoja de ruta de lo que debía de hacer su partido en Ourense. Con la salvedad, a su favor, de que él y Luis Menor, son uno, no hay reinos de taifas como antaño.

Han sido semanas de frases grandilocuentes, brindis al sol y sobre todo muchos intereses personales y de partido cruzados. La emoción de conseguir el poder, o la de no perderlo, se ha sentado desde el minuto uno en la mesa de negociación de la moción contra Jácome.

Todos tenían o tienen un objetivo común, compartido por una parte de la ciudadania, la que no votó al actual regidor y es que haya un relevo en la Alcaldía de Ourense. Pero unos quieren ser el alcalde o alcaldesa, para no perder el liderato en su partido. Otros, como el PP, exigen alternancia en esa alcaldía pos censura y, los terceros en discordia, el BNG, le niegan esa alternancia a la derecha, y huyen de ser comparsa en cogobiernos, que tan funestos resultados le dieron, llegando incluso a quedar sin representación en el hemiciclo municipal. Jácome les estorba a todos, pero el miedo a que el poder municipal caiga en manos de otros, es un riesgo electoral que ninguno está dispuesto a correr. Esa emoción mató a la moción.