La obra de la ronda este costará 9,8 millones y arranca en 2026 para estar rematada en 2028

Una década después de que el Plan Sectorial Viario de Ourense incluyera la previsión de la ronda este, una circunvalación que enlazaría, a través de un nuevo vial de 1,7 kilómetros, la OU-105 en Benposta con la autovía A-52 y la Nacional 525, acortando tanto los kilómetros como el tiempo de viaje de los 7 minutos actuales a 1 minuto y desviando ese tráfico de la ciudad, el proyecto técnico es ya una realidad e inició ya el proceso de información al público. La intención de la Xunta, si se cumplen los plazos previstos, es que la obra, con un presupuesto de 9,8 millones de euros, dé comienzo en 2026 y esté rematada y en servicio en el horizonte de 2028.

Son los datos y previsión de plazos que ofrecía ayer la conselleira de Vivenda e Planificación de Infraestruturas, María Martínez Allegue, en un acto celebrado en Ourense, en el que avanzó los pormenores de este proyecto definitivo, y ahora a exposición pública para la presentación de posibles alegaciones hasta el 7 de agosto, dado que implica un proceso expropiatorio de terrenos. Una vez resuelto este proceso, se comenzará con la expropiación de los terrenos y, culminado este, indicó la titular de Infraestruturas e Vivenda, comenzará el proceso constructivo.

La conselleira estuvo acompañada en la presentación del proyecto, fruto de un largo y complejo consenso, señaló, por el delegado de la Xunta en Ourense, Manuel Pardo, la delegada de infraestructuras de la Xunta, Pilar Fernández, Jorge Pumar, en representación de la Diputación, y Marta Nóvoa, alcaldesa de San Cibrao das Viñas, uno de los concellos beneficiados por esta circunvalación este.

De 4,6 kilómetros a solo 1,7

La conselleira explicó que este nuevo tramo pendiente de construcción, que enlazará la carretera OU-105, en Bemposta, hasta la N-525 y completará la circunvalación por el sur, conectando con la A-52, reducirá el tiempo de viaje, con un importante acortamiento en la distancia de recorrido hasta la autovía A-52, pasando de 7 los minutos y 4,6 kilómetros de longitud que hay en la actualidad entre Bemposta y la N-525, a poco más de 1 minuto, y un vial de 1,7 kilómetros, en el que se podría circular en ambos sentidos de circulación a 80 kilómetros por hora.

En este sentido, la conselleira subrayó la importancia de esta intervención para los ayuntamientos de Ourense y San Cibrao das Viñas.

Remarcó también que este vial de la circunvalación permitirá sacar tráfico del centro de Ourense, descongestionando el tránsito de calles como Marcelo Macías o la Avenida de Zamora.

Técnicamente es también una obra compleja, pues se prolongará la carretera OU-510, que une la OU-536 en O Ceboliño con la OU-105 en Bemposta, para conectarla con la N-525 y con la autovía A-52, completando un viario de circunvalación perimetral de la ciudad de Ourense, de acuerdo con lo previsto en el Plan Sectorial Viario de Ourense y su entorno.

La intervención se inicia en la glorieta en la que confluyen las carreteras autonómicas O-105 y O-510 y finaliza en el enlace de la N-525 y el ramal de acceso a la A-52.

Este tramo que se construirá, entre los puntos kilométricos 0+000 y 1+550, contará con dos carriles, un carril por cada sentido, de 3,5 metros cada uno, y arcenes de 1,50 metros. En las zonas de mayor pendiente habrá un carril adicional.

Viaducto sobre el Barbaña

Para ejecutar esta circunvalación, ha habido que incluir tres importantes estructuras. Una de ellas es un falso túnel de aproximadamente 55 metros de longitud justo donde pasa la línea de ADIF. También un viaducto de 95 metros de longitud sobre el río Barbaña y, finalmente, un paso superior que ya cara el final del trazado salva el acceso existente a la EDAR San Cibrao das Viñas.

Llegar al punto que se anunció ayer llevó su tiempo y lustros de espera, pues, según indicó la conselleira, estas tres estructuras muestran la complejidad del trazado, por lo que hubo que realizar adaptaciones para buscar la mejor solución. Así, por ejemplo, se remodeló el diseño del enlace de la N-525, una solución fruto del consenso previo con el Ministerio de Transportes.

La conselleira de Infraestruturas ratificó además en la presentación de ayer, que este vial ya venía previsto en el Plan Sectorial de la Red Viaria de Ourense y repasó los pasos dados en cuanto a la tramitación, desde la evaluación de impacto ambiental en 2020 hasta las modificaciones en el trazado en coordinación con el Ministerio de Transportes, debido a las necesidades estructurales para este tramo.

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