El aluvión de solicitudes desde el extranjero para lograr la nacionalidad colapsa los registros

Gomesende es uno de los concellos de la provincia que más peticiones recibe:“Antes tenía unas 5 en todo el mes y ahora casi 15 diarias, es muy difícil sacar todas adelante y estoy sobrecargada” indica una funcionaria

Una de las oficinas de registro de los concellos de Ourense a las que llegan solicitudes desde el extranjero cada día.   | // IÑAKI. OSORIO

Una de las oficinas de registro de los concellos de Ourense a las que llegan solicitudes desde el extranjero cada día. | // IÑAKI. OSORIO / aixa r. carballo

Desde que entró en vigor la Ley 20/2022 de Memomoria Democrática, el 21 de octubre de 2022, los registros de los diferentes concellos de la provincia han notado como se ha ido incrementando el número de solicitudesde desde el extranjero para recuperar partidas de nacimiento de antepasados. El motivo es que esta ley abrió un nuevo plazo para que los descendientes de españoles que abandonaron el país durante el franquismo puedan optar a la nacionalidad.Por el momento tienen hasta el 31 de diciembre de 2024 para hacer el trámite, pero son tantas las personas que quieren conseguir la doble nacionalidad que consulados y registros no dan a basto.

“Estamos saturados”, “no somos capaces de sacar el trabajo adelante”, “tuve que venir hasta por la tarde”, son solo algunas de las frases que dicen los empleados de las oficinas de registro de los diferentes concellos de la provincia de Ourense cuando se les pregunta por esta situación. Frases que muestran a la perfección la situación límite que ya han alcanzado. “Tengo 303 solicitudes acumuladas, de momento, porque cada día entran mínimo diez más”, reconoce la agente de la administración de justicial del juzgado de Celanova.

Esta empleada, tiene otras muchas labores en su día a día, tareas que son prioritarias para asegurar el buen funcionamiento de los juzgados, y las horas de su jornada no le llegan para decicarle mucho tiempo a recuperar partidas de nacimiento. “Por las mañanas tengo que ir a la sala de vistas, grabar los juicios, hacerles las fotocopias a los procuradores, controlar el correo, encargarme del archivo con una base de datos, pedir el material para el juzgado, atender a la gente que llega y a la que llama por teléfono y el resto de tareas ligadas al registro civil como matrimonios, nacimientos o defunciones”, explica. Encargase ahora del tema de la recuperación de nacionalidad le ha obligado a hacer horas extras por las tardes, pero desvela que “ya no puedo más porque aunque te quedes un día, en poco tiempo vuelven a acumularse un gran número de ellas”. Además, ella tiene un problema añadido, pues aunque Vilanova dos Infantes y Acevedo del Río forman ahora parte del Concello de Celanova, el primer lugar fue concello independiente hasta 1927 y el segundo hasta 1968, por lo tanto, su trabajo es triple.

Una de las oficinas de registro de los concellos de Ourense a las que llegan solicitudes desde el extranjero cada día.   | // IÑAKI. OSORIO

Libro en el que consultan las partidas de nacimientos. | // IÑAKI. OSORIO / aixa r. carballo

Libros con más de 150 años

Esta labor que están llevando a cabo todos los registros de la provincia consiste en buscar las partidas de nacimiento que les solicitan desde el extranjero vía email o a través del Ministerio de Justicia. La búsqueda la tienen que realizar en libros con más de 150 años de antiguedad, pues era donde antigüamente se inscribían a los recién nacidos y a día de hoy esa información no está digitalizada. “Hay que coger los tomos en los que están escritas las partidas e ir revisándolos manualmente hoja a hoja porque no tienen índice”, asegura la empleada del registro en el Concello de Avión.

Esta no es su única dificultad, pues en muchas de las solicitudes que le llegan no hay una fecha exacta del nacimiento, sino que le dan un rango de hasta diez años, lo que les obliga a revisar varios tomos para localizar a una sola personas y en consecuencia, retrasa el resto de búsquedas. “Cuando saben el año exacto es mucho más sencillo y rápido, pero cuando nos dicen años aproximados es más difícil y lleva un rato largo encontrarlo”, asegura Noemí, del registro del Concello de Quintela de Leirado. A esto también se suma, que muchos no saben el nombre exacto del pueblo de su antepasado y envían un correo electrónico a todos los concellos de la provincia, o incluso de toda Galicia. “La gente aunque no sepa en que pueblo o concello nació su abuelo o bisabuelo manda igual el correo a todos a ver si suena la flauta”, añade Noemí. “Esto aún nos complica más la búsqueda, pues tenemos que pararnos más a revisar porque no aparece por ningún sitio y antes de darles una respuesta tienes que asegurarte y les das varias vueltas a los tomos”, destaca Carmen, secretaria del registro del Concello de Boborás.

Solicitan que habiliten una oficina preparada con personal y medios para atender tantas peticiones

La secretaria del registro de Gomesende, uno de los concellos con más solicitudes de la provincia cree que la solución pasa por “habilitar una oficina preparada con personal y medios para que atiendan este aluvión de solicitudes”. Ella lleva desde principios de año viendo como su correo electrónico se llena cada día de nuevas solicitudes, una situación que nunca había vivido. “Antes tenía unas 5 en todo el mes y ahora casi 15 diarias, es muy difícil sacar todas adelante porque mis tareas son otras y estoy sobrecargada”.

Por eso, solicita una solución urgente en nombre do todas las personas que ahora están llevando a cabo estas funciones. “No sé quién tiene que valorar esto, pero estamos saturados por hacer un favor al extranjero. Nadie nos sube el sueldo por el trabajo extra que hacemos tampoco nos ponen refuerzo para aliviar el trabajo y ya no podemós más porque esto no nos corresponde a nososotros”, reconoce. Al igual que el resto, reconoce lo complicado que es revisar libros antiguos y en mal estado para responder una a una cada una de las peticiones que llegan cada día.

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