La viguesa Valiela negocia la compra de tres barcos arrastreros para reforzarse en NAFO

Se trata de los emblemáticos “Novo Virgem da Barca”, “Madrus” y “Lennuk” | Propietaria del “Monte Meixueiro”, utilizará ya sus cuotas hasta final de año | La operación, sin cerrar

El “Madrus”, “Novo Virgem da Barca” y
 “Lennuk”, abarloados ayer en Bouzas. | // L.G.

El “Madrus”, “Novo Virgem da Barca” y “Lennuk”, abarloados ayer en Bouzas. | // L.G. / Lara Graña

Lara Graña

Lara Graña

En febrero del año 2015, el bacaladero Nuevo Virgen de la Barca –de 56 metros de eslora y construido en Naval Gijón– fue exportado para trabajar bajo pabellón portugués. Había formado parte de la Asociación Nacional de Armadores de Buques de Pesca de Bacalao (Agarba), al igual que el Nuevo Virgen de Lodairo. Este segundo arrastrero también cambiaría de bandera años más tarde, en 2016, cuando pasó a tener matrícula en el puerto estonio de Tallin.

Una dupla de excepción que se sumaría a una tercera unidad, el Madrus (74 metros), operados todos con capital luso y español y habituales en las dársenas de Aveiro y Vigo. En esta última estaban este jueves, abarloados en el muelle de Bouzas y junto al destartalado Jacqueline F.1. de Freiremar. Ahora, los tres primeros –Novo Virgem da Barca, Lennuk y Madrus– enfilan un cambio de propiedad, según pudo constatar FARO en distintas fuentes de toda solvencia. La armadora Valiela se postula para formalizar su compra, en una operación que todavía no se ha cerrado y que, de materializarse, no tendría efectos plenos hasta el próximo ejercicio. Este periódico ha tratado de contactar con la compañía viguesa, sin éxito.

El "Jacqueline F1", ayer en Vigo

Costado de estribor del "Jacqueline F1", ayer en Vigo / Lara Graña

Valiela, heredera de lo que en su día fue el emblemático Grupo Molares, opera a día de hoy con el buque Monte Meixueiro, construido en el año 2005 por la desaparecida Astilleros M. Cíes. La compañía gestionaba asimismo también el Monte Galiñeiro, ensamblado en las mismas gradas y de 35,5 metros de eslora. Felizmente sin víctimas, se fue a pique a 235 millas de Canadá en febrero de 2009 con 22 personas a bordo.

La avería del motor principal del Monte Meixueiro afectó de forma determinante al resultado del ejercicio de la compañía en 2021, cuando solo pudo realizar una marea y logró una facturación de 9,25 millones de euros. El año pasado, ya con las cuatro campañas habituales, cosechó unas ventas de 17,7 millones, con un resultado positivo de casi otros 8,3 millones. “La empresa mantiene una visión prudente de fortalecimiento financiero para acometer nuevas oportunidades de inversión, al tiempo que poder seguir siendo competitiva en el futuro mediante la renovación de los equipos productivos”, expone en su memoria anual, depositada en el Registro Mercantil.

Las cuotas

Por lo pronto, como apuntaron fuentes del sector, Valiela faenará hasta final de año las cuotas asignadas a Novo Virgem da Barca, Lennuk y Madrus. “Desde luego, si no se ha cerrado la operación, esto pone a la armadora en primera posición para quedarse con ellos”, abundan. Utilizará el Monte Meixueiro, que ya tiene cupos en NAFO (Organización de Pesca del Atlántico Noroccidental) para fletán negro, bacalao, camarón, gallineta, raya y brótola.

Es referente singularmente en la pesquería de bacalao, para la que tiene un 24,46% de la cuota disponible para los buques españoles en la zona. Son cuatro las empresas que capturan este recurso: la propia Valiela, Pesquera Áncora (buque Lodairo), Velaspex (Arosa Nueve) y Pesquera Laurak Bat (Egunabar). La posibilidad de utilizar las cuotas de los arrastreros de pabellón luso y estonio le permitirá acceder a cuotas asignadas a estos países, presumiblemente a cambio de un arrendamiento que es habitual y del que no han trascendido más detalles.

De los tres congeladores, es el Madrus el de mayor capacidad. Su arqueo bruto (GT o gross tonnage) supera las 1.600 toneladas, lo que le permitiría acceder a zonas de pesca como las aguas internacionales próximas a Argentina o Malvinas, por ejemplo. En todo caso, la intención es la de someter a este buque a trabajos de reforma o reacondicionamiento. “Son barcos –apostillan en la industria– que necesitan inversión”. Al menos uno de ellos se pondría a la venta, sostienen, y siempre en caso de que Valiela finalmente consumase su compra. El proceso negociador se ha prolongado ya durante meses, en los que intervino, en calidad de antiguo gerente, el conocido armador portugués José Taveira da Mota.

Valiela es una de las mercantiles que dependen de Aucamoa Pesca, y que es propietaria a su vez de Ensenada 1702, Atungal o Profesionales Pesqueros SA.

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