La aparición de tierras contaminadas elevó 2 millones el coste de los accesos a Vialia

El Concello reactiva el túnel de la AP-9 después de que un alza de los precios del 22,94% lo paralizase

El túnel de la AP-9 a Vialia lleva dos años sin avances

El túnel de la AP-9 a Vialia lleva dos años sin avances / MARTA G. BREA

Víctor P. Currás

Víctor P. Currás

La transformación urbana que supuso para Vigo la apertura del centro comercial Vialia sigue esperando por su última pieza. El nudo de transportes entre la AP-9 y la nueva estación de Urzáiz reactivará en las próximas semanas sus obras después de que la Xunta de Goberno Local aprobara la última modificación del presupuesto necesaria para completar estos accesos.

Y es que más de cuatro años después del inicio de los trabajos en este entorno e incluso 18 meses después de la primera puesta en servicio del túnel de Lepanto, el segundo túnel desde la Autopista del Atlántico hacia Vialia no ha hecho más que acumular retrasos.

La aparición de tierras contaminadas en los terrenos ocupados por los antiguos talleres ferroviarios se tradujo en un sobrecoste de 2.118.829,51 euros de una obra que debería haber estar acaba en verano de 2022. Desde entonces, la UTE formada por Acciona y Narom solicitó hasta en cuatro ocasiones una ampliación de los plazos y los fondos ante la imposibilidad de resover una situación que ni Adif ni Ineco contemplaron en el proyecto previo.

Este sobrecoste representó un alza superior al 20% –22,94%– por lo que el Consello Consultivo de Galicia emitió un dictamen ordenando su paralización hasta que se justificara el nuevo convenio. Desde entonces, este vial de ida y vuelta entre la AP-9 y el aparcamiento interior ha quedado congelado mientras miles de vehículos y camiones se desviaban por otras calles del centro de la ciudad.