La falta de acuerdo prolongará la huelga de Vitrasa (al menos) una semana más

Comité de Empresa y dirección finalizaron su tercera reunión con la mediación sin avances

La rebaja en las exigencias económicas de los trabajadores no acercó las posturias

El comité de Vitrasa y la dirección de la empresa celebran una mediación

El comité de Vitrasa y la dirección de la empresa celebran una mediación / EFE / Salvador Sas

Víctor P. Currás

Víctor P. Currás

A la tercera no fue la vencida. La huelga de los trabajadores de Vitrasa vigente desde el 24 de noviembre continuará, al menos, hasta el próximo viernes 15 de febrero. El encuentro entre el Comité de Empresa y la dirección de la concesionaria ha finalizado su tercera reunión con la mediación del AGA sin acuerdo. A su postura de una única paga de 500 euros sin consolidar para los años 2021 y 2022, la empresa ha incorporado únicamente la eliminación de uno de los meses de vacaciones entre marzo y octubre para los trabajadores.

Esta medida, junto al mantenimiento de las ofertas sociales y el aumento desde enero de 2023 del 3% en los salarios ha sido considerada insuficiente por parte de los representantes sindicales. Fuentes del mismo reconocen que la reducción de este periodo "no le cuesta nada a la empresa" y su impacto sería reducido.

Desde la compañía perteneciente al Grupo Avanza consideran "incomprensible" que se continúe con la huelga ya que están "privando a la ciudad de un servicio esencial y haciendo prisioneros a los ciudadanos de una protesta sin sentido". A su vez, culpabiliza a sus trabajadores de no valorar que tienen "las mejores condiciones laborales de todo el colectivo de la provincia".

Al mismo tiempo insisten en la necesidad de desconvocar la huelga para recuperar la normalidad para recuperar los viajeros perdidos ya que "es lo único que permitiría mejorar la oferta realizada ya que es la base de los ingresos de la compañía"

De esta forma, la huelga continuará vigente como mínimo hasta el próximo viernes 15 de febrero, cuando se producirá la undécima reunión desde el inicio de la huelga y la cuarta con la mediación del organismo autonómico.

Rebaja de sus exigencias para desbloquearlo

Para poner fin a los paros, el comité ha rebajado sus expectativas y proponer una subida salarial para el año 2021 del 3%, al igual que en 2022. Pese a que reconoce que la pérdida de poder adquisitivo en esos años superó el 12% y a día de hoy alcanza el 16,1%, el comité ha subrayado que esta rebaja de sus pretensiones busca desbloquear el conflicto y paralizar la huelga indefinida, que comenzó a finales de noviembre del año pasado.

"Sabemos que la empresa se encuentra cómoda con los servicios mínimos puestos a la carta por el Concello, ya que con 49 autobuses diarios llenos de pasajeros su rentabilidad aumenta considerablemente y, además, el máximo responsable del transporte urbano, Abel Caballero, hasta ahora no les exige reponer el servicio", ha criticado el comité.

Al mismo tiempo, el colectivo de trabajadores ha recibido este viernes el apoyo de los trabajadores de ENCE en un comunicado oficial en el que "le envían toda su fuerza".

Veto al presidente del comité de empresa

Este mismo viernes se ha conocido que el Concello de Vigo ha vetado durante dos meses la asistencia a los plenos municipales al presidente del comité de Vitrasa, Imanol Arnoso, así como a otros seis empleados de la concesionaria del transporte urbano de la ciudad de Vigo.

En una resolución de Alcaldía, haciendo uso de las competencias atribuidas en el reglamento Orgánico del Pleno del Concello de Vigo, el gobierno local ha limitado la asistencia al pleno por un plazo de dos meses a estos siete empleados identificados en los partes de la Policía Local.

Todo ello tras los incidentes ocurridos en los plenos del 28 de diciembre y el 29 de enero, donde fueron identificadas estas siete personas y motivaron la suspensión del acto durante unos minutos mientras eran expulsadas de la sala por orden de la Presidencia.

Entre sus protestas, en las actas se recogen frases como: "Llevamos cuatro años con el salario congelado", "34 días con reivindicaciones que no valieron para nada", "Font mentiroso" o "Somos trabajadores pobres".

"Vitrasa solución" y otras consideraciones sobre el salario y las condiciones laborales que viven en la empresa fueron otras de las frases que gritaron en medio del pleno, obligando a que se suspendiese.