Un denunciado se enfada, vacía un extintor y obliga a desalojar la Ciudad de la Justicia de Vigo

Se activó la alarma contraincendios y decenas de personas tuvieron que salir del edificio

La sala de vistas quedó cubierta por el polvillo blanco del extintor

FDV

M. F. / A. L.

“Me levanté del juicio enfadado, salí, medité, cogí un extintor, esperé a que acabaran y, cuando salió el que me denunció, lo fumigué. ‘Para que se te bajen los humos’, eso fue lo que le dije”. Rafael Tenoira Reina, un exvendedor de cupones con graves problemas visuales bastante conocido en Vigo por recorrer la ciudad en bici y grabar documentales, fue el protagonista de un aparatoso incidente ocurrido este jueves en la Ciudad de la Justicia.

Denunciado en un juicio leve de daños que se iba a celebrar en el Juzgado de Instrucción 7 y molesto por esta acusación en su contra, tras aplazarse la vista para otra fecha porque faltaban testigos, reaccionó de una forma que no solo inundó del polvillo blanco del extintor la sala de vistas, sino que provocó que saltara la alarma antiincendios del edificio y numerosas personas saliesen a la plaza, donde estuvieron hasta que se confirmó que no había ningún incendio en la sede judicial.

Decenas de personas, a la espera de acontecimientos en el exterior del edificio

Decenas de personas, a la espera de acontecimientos en el exterior del edificio / M. F.

Minutos antes de las once, la activación de la alarma en algunas plantas del edificio rompía el ritmo de la ajetreada mañana de juicios en la Ciudad de la Justicia. Decenas de personas salieron a la gran plaza. Jueces, fiscales, abogados, procuradores, usuarios... se concentraron en el exterior alertados por los avisos acústicos. El desalojo duró unos minutos, fue momentáneo. No había ningún incendio en la gran torre. Pronto trascendió que la causa estaba en un incidente ocurrido en la sala de vistas 32 de la tercera planta, la de Instrucción 7, donde un denunciado en un juicio, enojado, había vaciado un extintor de los que hay en los largos pasillos del edificio.

“Somos testigos de otro juicio, estábamos esperando y vimos al hombre salir corriendo y volver con el extintor”, relatan Ángel e Imanol, socios de un local vigués que llegaron a grabar parte de lo sucedido, aportando dichas imágenes a la Policía Nacional. “Estaba enfadado, se sentó frente a la puerta con el extintor y cuando salió la funcionaria, ella le preguntó que qué hacía. Y a los pocos segundos, cuando salió el denunciante de su juicio, accionó el extintor”, agregan unas abogadas que también presenciaron lo ocurrido. La sala de vistas, donde estaban jueza, fiscal y abogado, así como la funcionaria en la puerta, se inundó de polvillo blanco. Hubo que trasladar el resto de juicios a otra estancia para limpiar la que resultó afectada.

No hubo heridos. El autor fue identificado y se realizó un atestado policial, dándose cuenta al juzgado de guardia y al juez decano. Cuando abandonaba el edificio judicial, Rafael, que contó a los policías que ya había usado extintores más veces, decía que el juicio que iban a celebrar contra él era una “farsa”. “Un conductor me denunció por daños en su vehículo cuando yo iba en bicicleta; no es así, fue el quien me agredió”, repetía.