El Concello recuperará el acceso original a las galerías de O Castro: la entrada será en zigzag
El diseño buscaba limitar la capacidad de movimiento de potenciales enemigos | Los restos “permiten recrear perfectamente” su configuración inicial | Caballero: “La ciudad revivirá las batallas navales de la antigüedad”
Las galerías que se musealizarán / Marta G. Brea
La máquina del tiempo que ganará Vigo a mediados de año en O Castro será todavía más precisa. El Concello reconstruirá la configuración inicial del acceso este a las galerías que se están musealizando, es decir, por donde se va a producir la entrada y recepción de los visitantes: será en zigzag. La actuación supone su aprovechamiento funcional. “La ciudad revivirá las batallas navales de la antigüedad”, resume el alcalde, Abel Caballero, sobre una actuación que cuenta con una inversión de 1.189.294 euros a cargo del Gobierno de España a través de una partida de 2 millones que el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio dedicó íntegramente al Ayuntamiento olívico y que ya permitió renovar la senda alrededor de las murallas.
En el desarrollo de los trabajos de musealización y puesta en valor de la fortaleza, que comenzaron a mediados de enero con un plazo de ejecución de cinco meses, los operarios comprobaron que el acceso se realizaba mediante una poterna –una puerta pequeña– practicada debajo de la cortina del muro y, para defenderla y ocultarla, se ejecutó todo el andar de aproximación mediante la excavación de una trinchera en la roca natural del terreno.
El diseño de este acceso buscaba defender la puerta de ataques frontales directos y limitar el volumen de tropas que podían acercarse, por lo que se construyó un andar estrecho en zigzag con la intención de limitar la capacidad de movimiento de potenciales enemigos y, a su vez, se protegió dejando una loma frente a la puerta, lo que impedía también la utilización de arietes u otras posibles máquinas de guerra.
Carmela Silva y Abel Caballero visitaron esta semana las galerías. / Marta G. Brea
Desde el Concello, destacan que los restos localizados en esta zona “permiten recrear perfectamente cómo era la configuración original de este acceso”, factor que se suma a la imposibilidad de realizar la solución arquitectónica inicialmente diseñada –puesto que implicaría la destrucción parcial del sistema defensivo de la poterna–, por lo que “se decidió reconstruir la configuración inicial aprovechándola funcionalmente”.
Las galerías que están siendo musealizadas en O Castro “con la máxima fidelidad” superan los 60 metros de largo y son fruto de una excavación realizada manualmente en la roca natural del terreno. Presentan una sección variable en tamaño y forma con distintos ramales ciegos, una zona de cruces derribada en la que fueron construidos tabiques de ladrillo y dos accesos que estaban parcialmente obstruidos de los cuales “se desconocían las características detalladas”.
Obras que se realizan fuera de los túneles / Marta G. Brea
El gobierno municipal lleva a cabo diferentes actuaciones en las galerías –rehabilitación, consolidación y musealización– e interviene en el polvorín –acondicionándolo como sala de exposición– y en la iluminación de la senda alrededor de las murallas. La intervención trata de hacer visitables los túneles a través de un hilo conductor en el que se recrearán una serie de acontecimientos históricos acontecidos en el municipio olívico en los últimos 300 años vinculados al leitmotiv “La defensa de Vigo”.
Este nuevo museo interactivo dará protagonismo a dos de las batallas más importantes de la historia de la urbe. Las anclas de los galeones hundidos en el estrecho de Rande en 1702 revivirán al recuperar su lustre y también se recordará la batalla naval de octubre de 1719 que desembocó en la toma y ocupación de Vigo durante 10 días por parte de las tropas inglesas en la Guerra de la Cuádruple Alianza. Los visitantes podrán empaparse del ambiente de esta efeméride con los ruidos, las luces y los sonidos de los fogonazos propios de este tipo de contiendas.
La visita a las galerías contará con una primera parte de preparación antes de acceder y permitirá a los ciudadanos ponerse en la piel de los refugiados en estos túneles en 1719. Al término del recorrido, recibirán una explicación en el patio de armas de la fortaleza, donde se encuentra el antiguo polvorín.
El castillo de O Castro se construyó en la Edad Media, al mismo tiempo que el castillo de San Sebastián y la fortaleza de unión entre ambos, que estaba formada por tres recintos amurallados. Solo se conserva el primer recinto –la fortaleza que corona la cima de O Castro– y parte del segundo –la fortaleza de San Sebastián–; el tercero es la muralla de la ciudad, de la que quedan restos soterrados. Las redes de galerías subterráneas eran habituales en este tipo de edificaciones y su utilidad era muy amplia: zona de refugio, vía de escape en caso de toma, almacenaje de todo tipo de intendencia e incluso enfermería.
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