Doce puestas de sol en las Cíes: un juego de niños para estar en órbita

"Papá, ¿se mueve la Tierra o se mueve el Sol?": un vecino de Samil realizó un seguimiento fotográfico cada mes de 2021 para responder a las preguntas de sus hijos

Un año de fotos en Samil, y una gran lección de astronomía.

Un año de fotos en Samil, y una gran lección de astronomía. / Elías Pérez Carrera

Marta Clavero

Marta Clavero

Gael, de 11 años, y Teo, de 7, son dos niños vigueses que residen con su padre en la avenida de Samil. Un lugar de recreo ideal para juegos, playa, deportes, o paseos en bici. Pero el arenal más icónico de la ciudad olívica es también una mina para la curiosidad de los más pequeños, que a cierta edad, se lo preguntan casi todo.

Y una de las dudas que le surgieron a Gael y a Teo mientras disfrutaban con su padre de una caminata por el barrio costero de la urbe, se la plantearon hace algo más de un año. Tenía que ver con la puesta de sol, y el presunto movimiento que realiza el astro, observado desde la Tierra. "Papá, ¿se mueve el Sol o La Tierra?", preguntaron los pequeños.

Sabemos que la Tierra se mueve alrededor del Sol, pero para los terrícolas, es esta gran estrella la que parece moverse alrededor de nuestro planeta, de este a oeste. Es lo que se llama movimiento aparente del Sol, que además varía de estación a estación.

Cuando Elías, ingeniero de Telecomunicaciones, quiso explicarle a sus hijos cuál era la realidad del fundamento en el que se basó la astronomía moderna, optó primero por la observación. Fue lo mismo que en su día había hecho Galileo Galilei, quien al perfeccionar el telescopio, confirmó la teoría heliocéntrica de Copérnico. Observó los cielos y demostró que eran los planetas los que giraban alrededor del Sol, algo que contradecía la creencia de que la Tierra era el centro del Universo.

Este padre cambió el telescopio del astrónomo italiano por un simple 'smartphone', para llevar a cabo su particular experimento, que superaría en creatividad y funcionalidad a cualquier discurso sobre órbitas, movimientos de rotación y traslación, inclinación del planeta, o solsticios. "Les comenté a los niños, qué les parecía si hacíamos una foto cada mes de la puesta de sol, durante todo un año, siempre desde el mismo lugar. No pudimos hacerla todos los día 1, que era nuestra idea, ya que en ocasiones llovía o no había sol. Pero siempre pudimos hacerla los primeros días de cada uno de los doce meses del año 2021".

Desde el mirador del paseo, y apoyados en una de la barandillas de bajada a la playa realizaron esa docena de instantáneas. Una vez recabado todo el material llegó el momento de hacer la magia. Y es que cada foto, tenía elementos que las hacía muy diferentes la una de la otra, y a simple vista, no permitía comprobar claramente lo que pretendía enseñarle Elías a sus hijos.

Las doce puestas de sol que fotografiarion Elías, Gael y Teo desde el paseo de Samil, cada mes de 2021.

Las doce puestas de sol que fotografiarion Elías, Gael y Teo desde el paseo de Samil, cada mes de 2021. / Elías Pérez Carrera

"Con un programa de retoque fotográfico, recortamos cada foto por la línea del horizonte, con las Islas Cíes como referencia central, e hicimos un montaje por orden cronológico colocando cada foto debajo de la anterior, desde enero a diciembre", explicó Elías a FARO. Reconoció además que "Teo, el más pequeño, era el más interesado en el resultado, ya que le gustan mucho estas cosas. En el caso de Gael, le atrajo más el proceso de edición con el programa fotográfico", una curiosidad que quiso destacar, dando a entender, medio en broma, las diferentes inquietudes de los hermanos.

El resultado final de doce meses de seguimiento, una foto espectacular firmada por los miembros de esta familia viguesa: Gael, Teo y Elías.

El resultado final de doce meses de seguimiento, una foto espectacular firmada por los miembros de esta familia viguesa: Gael, Teo y Elías. / Elías Pérez Carrera

El resultado final, además de bello, permite unir visualmente los puntos de la posición del Sol en cada una de las fotos, dibujando una órbita imaginaria que, a la postre es la que realiza la Tierra al girar alrededor del astro del sistema solar. Una foto hermosa y espectacular obtenida tras el seguimiento de 365 días, con el que Elías logró mantener y motivar el interés de sus hijos durante mucho tiempo, de una forma experimental, e implicándoles a ellos en el proyecto. Sin duda, toda una lección de aprendizaje.