El secretario xeral de Relacións Institucionais de Vicepresidencia, Antón Losada, trasladó ayer al PP su "desprecio" por exigirle públicamente que aclare si cometió "irregularidades" laborales al tener a una empleada de hogar sin seguro durante ocho años.
En un comunicado, Losada afirma que Amalia Castro trabajó a tiempo parcial en su domicilio y aclara que existía un "contrato verbal" pactado entre ambos, con los términos "claros". "Un servicio doméstico a tiempo parcial, nunca superior a las ochenta horas al mes y que incluía un mes de vacaciones pagadas al año", apunta.
El secretario xeral de Relacións Institucionais indica al PP que la normativa laboral establece que, en estos casos, no es obligatorio que exista un contrato a través del servicio público de empleo y permite que baste la forma verbal.
Seguro
En relación con la existencia de un seguro, Losada apunta que, según el régimen especial de empleados del hogar, quien contrata tiene la obligación de asegurar solamente si se dan dos circunstancias: que el trabajador realice más de 80 horas al mes y que trabaje de manera exclusiva para él.
Señala que, en este caso, no se cumplía ninguna de las dos condiciones ya que el número de horas era inferior y, según afirma Losada, la asistenta compatibilizaba el trabajo en su domicilio con otros servicios en casas de particulares, con tareas de limpieza en un colegio de Santiago y con su ocupación como agente libre de una compañía de seguros.
"Era su obligación estar asegurada, así se le manifestó siempre expresamente y siempre nos acreditó que estaba asegurada, como así lo prueba que, cuando lamentablemente sufrió una enfermedad, el seguro se hizo cargo de su baja", apunta Losada.
El secretario xeral niega que Amalia Castro fuese despedida por pedir un aumento de suelo y explica que el fin de la relación laboral se produjo de "mutuo acuerdo".
