La ayuda de la Iglesia llega a 145.000 personas: “Sin el apoyo de Cáritas no hubiera salido adelante”

Las cinco diócesis gallegas hacen balance por primera vez de forma conjunta de sus actividades y su memoria económica

Por la izquierda, el obispo de Lugo, Alfonso Carrasco; el obispo de Tui-Vigo, Luis Quinteiro Fiuza;  el arzobispo de Santiago, Francisco José Prieto; el obispo de Ourense, Leonardo Lemos Montanet; y el obispo de Mondoñedo-Ferrol, Fernando García Cadiñanos. |  // ANTONIO HERNÁNDEZ

Por la izquierda, el obispo de Lugo, Alfonso Carrasco; el obispo de Tui-Vigo, Luis Quinteiro Fiuza; el arzobispo de Santiago, Francisco José Prieto; el obispo de Ourense, Leonardo Lemos Montanet; y el obispo de Mondoñedo-Ferrol, Fernando García Cadiñanos. | // ANTONIO HERNÁNDEZ / Mateo G. triñanes

Mateo G. Triñanes

Por primera vez, las cinco diócesis de la comunidad presentaron de manera conjunta su Memoria Económica y de Actividades, correspondientes al año 2022. Lo hicieron en un acto celebrado en Santiago que contó con la presencia del obispo de Lugo, Alfonso Carrasco; el obispo de Tui-Vigo, Luis Quinteiro Fiuza; el obispo de Ourense, Leonardo Lemos Montanet; el obispo de Mondoñedo-Ferrol, Fernando Cadiñanos y el arzobispo de Santiago, Francisco José Prieto.

La Iglesia gallega quiso poner el foco en las personas y en la labor asistencial de las instituciones eclesiásticas. Casi 145.000 personas en Galicia se beneficiaron de los programas para mitigar la pobreza, para rehabilitarse de la drogodependencia, de asistencia a emigrantes y refugiados, de atención a las víctimas de violencia de género, promoción del trabajo o tutela de la infancia, entre otros.

Sin duda alguna, el buque insignia en esta labor es Cáritas que, gracias al trabajo de sus más de 4.645 voluntarios, logró mejorar las condiciones materiales de vida de casi 71.808 ciudadanos. Una de ellos fue Lucía que llegó a la capital gallega en 2021. “Llegué de Uruguay durante la pandemia, por lo que encontrar trabajo se convirtió en una tarea muy difícil. Cáritas me ayudó con alimentos durante ese tiempo y gracias a sus programas de arraigo por formación pude encontrar trabajo y lograr el permiso de residencia. Sin ellos no hubiera podido salir adelante”, agradeció.

“Somos la caricia de la Iglesia a su pueblo”, señaló la directora de Cáritas Diocesana en Santiago, Pilar Farjas. La ayuda que prestan, según explicó, con el paso del tiempo y el desarrollo económico de la sociedad va mutando. “Quizás la necesidad de pan y techo no es tan alta como en los albores de la Iglesia, pero van apareciendo nuevas demandas como la soledad no deseada que cada vez afecta a más ciudadanos y en la que desde Cáritas tenemos un trabajo inmenso por delante”, auguró Farjas.

Más allá de la tarea asistencial de la Iglesia, las cinco diócesis gallegas destacaron durante el acto la actividad pastoral desarrollada a lo largo del año y que se culminó con la celebración de 8.756 bautizos, 10.055 comuniones, 4.980 confirmaciones y 1.429 matrimonios. “Todavía hay gente que se sigue casando por la Iglesia”, bromeó el presentador. En total, 1.200 sacerdotes ejercen su ministerio en las 3.644 parroquias de la provincia eclesiástica de Compostela.

Al igual que hay gallegos que continúan celebrando sus nupcias de forma cristiana, la Iglesia gallega sigue ejerciendo su actividad en el ámbito educativo. En el primero de ellos, las diócesis gallegas gestionan en la comunidad 180 centros educativos concertados. Uno de ellos es el del Sagrado Corazón de Ferrol que gestionan las Hermanas Mercedarias. Su directora, Sonia González, apuntaba que en este tipo de centros se trata de llevar a cabo “una educación integral del alumno”, poniendo el acento no solo en el ámbito teórico y memorístico sino también “en la transmisión de los valores cristianos”.

Las diócesis gallegas continúan también aportando capital humano a la misión evangelizadora. Concretamente, 245 misioneros gallegos estuvieron movilizados a lo largo y ancho del globo durante el 2022 para llevar la palabra de Jesús a tierras lejanas. Es el caso de Ramón, que estuvo más de catorce años realizando esta tarea en Venezuela. ”Yo estuve en el Amazonas, donde había más de 20 comunidades indígenas diferentes. Es el verdadero reino de la diversidad, cuando regresé me di cuenta que aprendí más de ellos que ellos de mí”, explicó.

Gestión económica

La Iglesia gestiona además un importante patrimonio. En este sentido, durante el 2022 se dedicaron más de 16 millones de euros a la rehabilitación de edificios.

Sin embargo, la cuenta más importante de gasto de la Iglesia en Galicia es la dedicada a la actividad pastoral y asistencial en donde invirtió más de 18,5 millones de euros.

En el capítulo de gastos ordinarios hay que añadir, además de lo asignado a la conservación de los templos, casi 20 millones para la retribución del clero y el resto del personal, así como los 1,8 millones que las diócesis aportan a los centros de formación.

Junto con los gastos extraordinarios y la capacidad de financiación, esto arroja un desembolso anual de 65,4 millones de euros.

Para contrarrestarlo, en el capítulo de ingresos la partida más importante proviene de las aportaciones directas de los fieles que ascienden a 24,5 millones de euros. A través de la campaña de la Renta, la Iglesia gallega se embolsa 19,3 millones de euros –solo el 23,9% de los contribuyentes gallegos marca la X, muy lejos del 31,2% que registra la media estatal–. A esto hay que añadir los ingresos por patrimonio, los corrientes y los extraordinarios para alcanzar, también, los 65,4 millones que consignaron los ingresos de la Iglesia en 2022.