Emprego se encomienda a la tecnología para que empresas y trabajadores hagan “match”

El software EMi, ya implantado en las 54 oficinas autonómicas, usa IA y modelos predictivos para casar oferta y demanda laboral

El conselleiro de Emprego, José González, y la directora xeral de Formación, Zeltia Lado. |   // FDV

El conselleiro de Emprego, José González, y la directora xeral de Formación, Zeltia Lado. | // FDV

Javier Ramos

¿Puede la tecnología ayudar a resolver los problemas estructurales de empleo que presenta la economía gallega? Esta es una de las preguntas que ha decidido hacerse la Xunta de cara a este nuevo mandato que todavía no ha cogido velocidad de crucero. Aunque Galicia es una de las comunidades autónomas que mejora la media estatal en cuanto a porcentajes de desempleo, sigue siendo parte de un país en el que las tasas de paro son una anomalía negativa en comparación con el conjunto de Europa.

De manera paralela, miles de plazas –el gobierno gallego estima que son unas 15.000– permanecen sin cubrir en empresas de toda Galicia, que demandan profesionales con formación específica, especialmente en ámbitos como la logística o la industria. ¿Cómo resolver este desajuste y avanzar hacia tasas de pleno empleo? Una de las respuestas a esta pregunta, para la administración autonómica, es: a partir de la tecnología.

La pasada semana, el conselleiro de Emprego, Comercio y Emigración, José González Vázquez, comparecía ante los medios al término de la reunión semanal del Ejecutivo gallego con un titular: el servicio público de empleo de Galicia incorporará inteligencia artificial. ¿Con qué fin? El de precisar al máximo las competencias de cada demandante de empleo para poder dar con las ofertas más adaptadas a sus capacidades. Explicaba el conselleiro que su propósito no era otro que “casar oferta y demanda”, de modo que las empresas también tuviesen conocimiento de qué perfiles profesionales hay en el mercado de trabajo.

La base de toda esta campaña es el sistema informático EMi, cuyo funcionamiento ha detallado la Xunta en un encuentro con medios, en el que han profundizado en las características de esta tecnología, ya implantada en las 54 oficinas de empleo gallegas. Esta plataforma almacena, ordena y procesa una ingente cantidad de datos, con los que permite filtrar la lista de demandantes de empleo en base a varios parámetros, como su formación o su localización geográfica (con varios niveles de proximidad, desde la provincia hasta la comarca o el municipio).

El objetivo del gobierno gallego es que, para este mes de septiembre, haya ya incorporados al sistema unos 70.000 perfiles competenciales detallados de demandantes de empleo en Galicia. Con este fin, se citará en las oficinas de empleo a aquellos parados que hayan estado en búsqueda de un trabajo por más de un mes. Allí serán atendidos por los técnicos, que, mediante una entrevista personal, podrán crear sus perfiles en la nueva plataforma incorporando parámetros como su edad, formación, ámbito territorial, competencias y experiencia profesional.

Una de las novedades del sistema EMi es que trabaja a partir de la clasificación europea de competencias y ocupaciones ESCO, diferente a la Clasificación Nacional de Ocupaciones (CNO), estándar que utilizan los servicios estatales de empleo. Esta clasificación europea incorpora, además de un listado detallado de las diferentes ocupaciones existentes en un mercado laboral, las competencias –habilidades– ligadas a las mismas.

En la actualidad, están registradas más de 13.900 competencias diferentes que son requeridas por hasta 2.200 ocupaciones, para las cuales pueden ser esenciales u optativas y complementarias. El ejemplo facilitado por el gobierno gallego para explicar este sistema fue el siguiente: una persona que trabaje en eólica terrestre y otra especializada en construcciones marinas pueden tener en ambos casos competencias necesarias para el desarrollo de una ocupación relacionada con la eólica offshore. Por este motivo, desde la Xunta han puesto el foco en adaptar y hallar correlaciones entre el sistema ESCO y el CNO que permitan operar con ambos sistemas.

A partir de esta taxonomía y de todos los datos volcados, la plataforma EMi, con el apoyo de diferentes algoritmos de inteligencia artificial, puede arrojar balances de compatibilidad de demandantes de empleo con ofertas concretas, identificar qué requisitos faltan por cumplir para encajar de manera óptima y realizar predicciones de la evolución del mercado laboral en zonas concretas. Además, González Vázquez ha asegurado que la intención es que exista información en tiempo real no solo sobre ofertas públicas de empleo, sino también sobre las empresas que estén buscando personal.

Todo este procesado de información facilita la labor de los técnicos de los servicios de empleo, que, a partir de estas premisas, podrían formular ofertas adaptadas de forma precisa a las características de los demandantes de empleo. El hipotético rechazo de estas propuestas, advirtió el conselleiro durante la presentación, podría incluso derivar en un expediente sancionador que conllevase, de confirmarse, la retirada de los beneficios asociados a la inscripción en los servicios de empleo, como las prestaciones.