El remanente de Agolada se queda en 29.000 euros tras destinar 200.000 a facturas

PAyJ tumba las mociones de la oposición y anuncia un proyecto para la biblioteca

REDACCIÓN

El ejecutivo de Agolada aprovechó ayer su mayoría absoluta para aprobar una modificación de crédito de 200.000 euros, con los que abonará facturas del año pasado. Tras este cambio de partida, al Concello le quedan solo 29.000 euros de remanente para afrontar otros imprevistos que surjan en lo que queda de año.

Desde la oposición, el PP presentó dos mociones y el BNG, una. Ninguna de ellas salió adelante. Desde el PP Carmen Seijas propuso fiscalizar las facturas de comidas, ya que hubo un gasto de 5.000 euros, y en los últimos meses la cifra asciende a 10.000. El alcalde, Luis Calvo, esgrimió que se fía de los restaurantes para no establecer un sistema en el que en cada factura se indique el nombre del comensal y la fecha. Tampoco tendrán que comparecer los concejales Óscar Val y Pedro García para explicar su cambio de declaración en el conocido como caso Farelo.

Sobre la moción del BNG, en la que Susana Tato solicita tramitar la transferencia del centro de salud al Sergas, Calvo apuntó que tiene un proyecto para este edificio, así como para la biblioteca y el centro social de la tercera edad. En ruegos y preguntas, Tato recordó que sigue sin materializarse la colocación de rampas que permitan usar el auditorio a las personas con movilidad reducida. Carmen Seijas le reprochó gastos abultados como 1.500 euros por cambiar un bombillo y la cerradura de una puerta. La oposición criticó también la pérdida de una ayuda para el punto limpio por no poder cofinanciar la obra.