Gracias por tu ejemplo, Samaritano de Laro

Bien usadas, las redes sociales pueden acercarnos a las personas. Y José García supo hacerlo: cualquier actividad solidaria que ponía en marcha tenía una gran acogida y repercusión a través de su perfil de Facebook.

Para nosotros, los medios de comunicación, las redes se han convertido en una fuente de información más, y de ahí que en el caso de FARO sus iniciativas casi tenían sección propia en nuestra agenda. Porque en realidad, José, tú mismo te habías convertido en una fuente más, y también un ejemplo a seguir en un mundo en el que muchos prefieren vivir y “conocer gente” en el metaverso pero que en el día a día ignoran (o no quieren ver) las necesidades por las que puede estar pasando su vecino, un familiar o su amigo del alma.

Campañas de recogida de ropa y calzado válidos para una nueva vida, de libros que merecen ser hojeados de nuevo, sesiones de magia con fines solidarios... todo ello le sirvió para ganarse el apodo de O Samaritano de Laro. Ganarse el apodo, pero también el respeto.

José García era usuario de Aspadeza y desde hace varios años, además, formaba parte de la directiva, como vocal. Con ello, dejó claro, como otras tantas personas con discapacidad, que la inclusión es necesaria en una sociedad que desee ser llamada justa e igualitaria. Ayer, sus restos mortales recibían sepultura en Laro, en la intimidad familiar. Nos queda como legado su ejemplo y su entrega, infinitos, durante sus 43 años de vida.