Se ofrecen trabajadores sin etiquetas

El centro Juan María muestra las ventajas del empleo inclusivo a más de 50 empresas

La ronda de contactos en el jardín del Pazo de Cea, ayer. // CEDIDA

La ronda de contactos en el jardín del Pazo de Cea, ayer. // CEDIDA / Neli Pillado

Tienen ganas y entusiasmo para regalar cuando acceden a un puesto de trabajo. Porque se han forjado en la superación de barreras desde la infancia y porque alcanzar la difícil meta de la inclusión laboral es una oportunidad que ninguno puede permitirse dejar escapar. Esta es, básicamente, la gran ventaja de contratar personas con diversidad funcional, independientemente de las económicas que pueda ofrecer la Administración. A los más de 50 empresarios que ayer participaron en el “Desayuno sin etiquetas” organizado por el centro Juan María de atención integral a la discapacidad les ha quedado claro.

La jornada se desarrolló en el Pazo de Cea al más puro estilo de una feria sectorial en busca de contactos y negocios para el futuro. La idea era romper los prejuicios o el desconocimiento que muchas veces frenan las contrataciones. El Juan María dispone de un centro especial de empleo, una especie de empresa que ofrece un trabajo a los usuarios a la vez que los forma bajo la filosofía de “aprender haciendo”. La de auxiliar de comercio es una de sus especialidades y la desarrolla a través de las tiendas de la marca de ropa propia Juan María by Lolola con apoyo de la Xunta y del Gobierno central.

Tres de las diez personas que se han preparado en las boutiques de los centros comerciales Nasas y Vialia trabajan ya en empresas como Leroy Merlin, Eroski o en el restaurante La Genuina de Praia América. “Todo un acierto” para sus responsables, que ayer compartieron con los empresarios asistentes su experiencia. No solo por el rendimiento de estos trabajadores, sino por el “extra de buen ambiente y compañerismo” que aportan. Y es que contratar personas con capacidades diferentes “suma calidad humana y una unión en las plantillas que muchas veces no existía antes”, asegura Vanesa Iglesias, coordinadora del centro especial de empleo Juan María Sin Etiquetas, como se llama ahora.

Algunos de los trabajadores y monitores del centro especial de empleo Juan María Sin Etiquetas.

Algunos de los trabajadores y monitores del centro especial de empleo Juan María Sin Etiquetas. / Neli Pillado

Fueron numerosos los propietarios de negocios interesados en ofrecer contratos a los trabajadores del centro especial de empleo, que además de formar auxiliares de comercio, prepara para la jardinería, limpieza, conserjería e incluso imparte especializaciones en riego y poda, monitor de transporte escolar y ayuda en comedor, serigrafía... “Fundamentalmente tenemos personal de comercio y servicios, ofrecemos chicos formados, pero también podemos escuchar a las empresas para formar a chicos para cubrir un puesto específico”. señala Iglesias.

"Ofrecemos personas que valen, tienen ganas y van acompañadas de un preparador laboral"

Y no solo eso. Juan María Sin Etiquetas garantiza el acompañamiento de los trabajadores en su nuevos puestos el tiempo que sea necesario. “Lo que queremos es que los empresarios pierdan el miedo, que den un paso más. Siempre dejamos claro que desde nuestro centro especial de empleo tendrán apoyo siempre que lo necesiten y seguimiento el tiempo que sea necesario para que todo vaya bien. Ofrecemos una persona que vale, tiene ganas y va a acompañada de un preparador laboral”, añade.

Al encuentro empresarial acudieron autoridades como el secretario xeral de Emprego, Traballo Autónomo e Economía Social de la Xunta, Pablo Fernández; la directora general del Consorcio de la Zona Franca de Vigo, Inés González; el alcalde, Juan González, y varios concejales.