Yennifer Caneda, la joven de O Grove de 19 años que el miércoles resultó herida de gravedad como consecuencia de un accidente laboral, trata de sobreponerse al daño físico y moral que le ha causado este suceso.

Finalmente, tras una larga intervención quirúrgica que finalizó a la una de la madrugada de ayer, los médicos solo pudieron salvarle el dedo pulgar de su mano derecha. Parece que los restantes estaban tan "machacados" que fue imposible reconstruirlos.

"Solo le quedaron algunas falanges, pero no se descarta que tenga que ser intervenida nuevamente para quitárselas", explica su padre, Antonio Caneda, aún consternado por lo sucedido.

Los hechos, cabe recordar, tuvieron lugar en las instalaciones de Frigoríficos del Grove (Frigrove), un centro transformador de pescado ubicado en la subida a Monte Siradella.

La joven grovense trabajaba en una máquina trituradora de pescado que se atascó, y cuando intentó que recuperara la actividad su mano quedó aprisionada.

FARO DE VIGO contactó con la empresa para conocer la postura de su dirección, pero no fue posible. La versión de los hechos que aporta el padre de la víctima es que la máquina en cuestión "es una tolva con forma de 'V' en la que se mete el pescado para ser triturado". Resulta que "a veces se atasca, y como no hay un sistema de seguridad ni algún instrumento para desatascarla, los operarios, en este caso mi hija, tienen que meter la mano; lo que pasó fue que en ese instante se puso de nuevo en marcha y se la trituró".

Muy enfadado con las noticias que le llegan desde la empresa, donde ayer se produjeron diversas reuniones a nivel de dirección y con las trabajadores, Antonio Caneda advierte de que no va a consentir "que intenten achacar este accidente laboral a un despiste de mi hija; trabajó con esa trituradora miles de veces y no estaba despistada en absoluto, sino que realizaba su trabajo de siempre".

A su juicio, "no puede ser que una máquina tan peligrosa no tenga medidas de seguridad". Por eso confía en que los inspectores de trabajo "aclaren los hechos, aunque la máquina fue totalmente desmontada para poder liberar a mi hija".

Al margen de esta cuestión, sostiene que tanto su hija como él, la madre y demás miembros de la familia tratan de "mentalizarse" tras lo sucedido, "pues entre todos tendremos que salir adelante".

Caneda aprovecha para agradecer las muestras de apoyo recibidas desde que se conoció la noticia del accidente.