A Casa Grande de A Cerca, el pazo solariego ubicado en la parroquia de Chaguazoso, en el Concello ourensano de A Mezquita en el que, desde hace casi tres años vive el exbanquero y ahora líder político Mario Conde y su esposa, con categoría legal de inquilino del inmueble, con derecho a compra, sigue figurando en las páginas oficiales de Turgalicia de la Xunta de Galicia, y en decenas de páginas webs más, como una casa de turismo rural, 6 habitaciones doble y una suite, con precios a razón de 75 y 120 euros por noche, menús a 20 euros y unos teléfonos de contacto.

Pero si uno llama a esos teléfonos para pedir reserva, contesta una amable voz, que advierte que el número está equivocado. Es decir, que la Secretaría Xeral de Turismo, sigue dando cobertura promocional con dinero público en su web de Turgalicia, a una casa para el turismo rural rodeada de cuatro hectáreas y un paradisiaco paisaje apto para la pesca y para la caza, que es de uso exclusivo para su inquilino, familiares y amigos.

Paradojas de la vida, Alberto Núñez Feijóo le estaría por tanto dando publicidad, seguramente sin saberlo, a la vivienda de un banquero, que va a ser además su oponente en las urnas, pues Conde está haciendo malabarismos con el calendario, para llegar a tiempo y presentarse como candidato a la presidencia de la Xunta al frente de la formación Sociedad Civil y Democracia (SCYD). Un nuevo partido, con el que Mario Conde aspira a ser la rebarbadora de votos del PP.

"En esta operación de arrendamiento no hay nada ilegal. De hecho yo no le alquilé el pazo al señor Mario Conde, sino a una empresa de su propiedad que se llama Bernaclas S.L. Todo el proceso figura en documentos públicos y es transparente", explica Gabriel Caldelas, propietario de esta casa rural polémica desde su inicio, pues fue restaurada con fondos de la UE, padre de la exdiputada del PP María José Caldelas y suegro por lo tanto del presidente del PP de Ourense y presidente de la Diputación Manuel Baltar .

Y es que si Galicia es un pueblo, Ourense se queda en minifundio, en el que amor y negocio cohabitan en la misma leira. De ahí que a las familias Baltar y Caldelas les una ahora, además de un matrimonio, una profunda amistad personal y complicidad política con Mario Conde, quien abona 75.000 euros de alquiler a los suegros de Manuel Baltar. Asimismo y al tratarse de un arrendamiento con derecho a compra, el mediatico exbanquero y excontertulio de Intereconomía, será supuestamente propietario legal del pazo en el año 2015, tras pagar los 1,8 millones que le pidió la familia Caldelas por la bellísima y singular propiedad.