El vendaval que barrió el sábado parte del litoral urbano de Cangas ha sembrado desolación en el Náutico Rodeira y el Vila de Cangas de remo, cuyos directivos calculan en "cientos de miles de euros" los daños ocasionados y auguran "duros momentos" para poder mantener la actividad si no llegan pronto ayudas públicas y privadas, así como el apoyo de socios y simpatizantes. "Esta situación nos pone al borde de la quiebra y la disolución ante la incapacidad de hacer frente a los gastos y de cumplir los compromisos para la temporada", aseguran los representantes del Vila de Cangas, mientras el presidente del Náutico, Humberto Ferral, ya plantea promover una campaña para pedir ayuda y "reflotar" el club.

Los directivos explican que la nave de deportes náuticos quedó "prácticamente inutilizada", pues el viento y el agua se llevaron unos mil metros cuadrados de cubierta (ya había sucedido lo mismo en 2004, aunque con efectos más leves) y parte de los equipos y la documentación que albergaban las instalaciones, remodeladas recientemente, como las zonas comunes, el foso, el gimnasio y el hangar, detallan. "Una embarcación se precipitó al suelo, partiéndose en dos, el mobiliario se ha deteriorado, casi la totalidad de los remoergómetros y el material informático han quedado inutilizados por la lluvia, la documentación se ha perdido al empaparse de agua, el gimnasio se encuentra totalmente a la intemperie...", enumeran desde el Vila de Cangas, que movilizó a deportistas, directivos y socios para achicar el agua y poner a salvo los enseres. Los desperfectos llegan "en el peor momento para el club" y dos años después de sufrir pérdidas por 45.000 euros en un accidente de tráfico.

En las dependencias anexas, del Náutico Rodeira, Ferral y otros miembros del club no dieron abasto ayer intentando reponer los servicios y atender a los socios afectados. El primer recuento cifra en una veintena los yates con el mástil roto o dañado, incluidos los equipos de comunicaciones, y en unos 18.000 euros el coste de la reparación de cada uno, así como unas "10 o 15" más con daños menores. Asimismo, el temporal dañó dos embarcaciones de vela ligera propiedad del club.

También la casa consistorial fue destechada por el viento. El alcalde anunció que hoy ya trabajará una empresa para reponerlo y garantizar su estanqueidad.