El Partido Popular de Lalín propone solicitar al gobierno local la implantación de puntos de lectura o pequeñas bibliotecas en los centros sociales para fomentar la lectura y las actividades con ella relacionadas. La concejala María José Senande dio a conocer ayer una moción que llevará al pleno municipal para defender la propuesta, que pasa por recuperar la biblioteca itinerante para acercar libros y otras publicaciones a la población rural, sobre todo a los niños.

El Concello de Lalín cuenta con una extensa red de locales que dan cobertura a la práctica totalidad de la ciudadanía del municipio, dinamizados en gran medida por las asociaciones vecinales y, especialmente, por las de mujeres rurales durante los últimos años. Además de cursos, charlas y actividades relacionadas con la cultura, el ocio y la salud, el anterior gobierno del PP puso en marcha una iniciativa para potenciar la lectura en el rural: Una biblioteca itinerante que permitió acercar fondos bibliográficos a la población y, sobre todo, literatura infantil a los más pequeños.

Senande entiende que "sería positivo dar continuidad a la iniciativa, introduciendo variables que permitan optimizar el servicio y hacerlo que sea lo más universal posible a los vecinos del rural de todas las edades". En este sentido, propone la realización de actividades de índole promocional enfocadas a potenciar la lectura en el rural, seleccionando las parroquias o lugares que se consideren de mayor interés por número de vecinos y/o de niños censados o por las propias infraestructuras disponibles, entre las que cita Vilatuxe, Filgueira, Goiás o Donramiro. Sería necesario llevar a cabo una selección de personal -voluntario o municipal- que pueda desarrollar el papel de coordinación de las actividades en los distintos centros elegidos.

El siguiente paso consistiría en "acometer la creación de puntos de lectura permanentes o pequeñas bibliotecas" en los locales seleccionados, con fondos propios -libros de segunda mano o fondos cedidos por la biblioteca municipal- y otros aportados por organismos externos, caso de Diputación de Pontevedra y Xunta de Galicia. Luego vendría la aplicación de un programa de actividades relacionadas con la lectura, como representaciones teatrales, cuentos, monólogos, películas, charlas o talleres.

La finalidad de estos puntos sería incrementar el nivel de lectura en el rural para convertirlo en un hábito entre las personas con dificultades para acercarse a la biblioteca municipal, así como facilitar el acceso de la población a libros, periódicos, tebeos y otras publicaciones para generar dinamización cultural y actividades relacionadas.