La terapia con perros adiestrados que el Concello ofrecía hasta ahora a asociaciones que atienden a enfermos de Alzhéimer y personas con alguna discapacidad llega también a los colegios con el objetivo de motivar el aprendizaje y ayudar a corregir el comportamiento de menores con alguna dificultad. Un educador canino, dos terapeutas guía y un veterinario integran el equipo municipal que ya está trabajando en A Doblada y que se ofertará bajo demanda a quince colegios públicos de la ciudad durante los próximos dos trimestres.

El alcalde, Abel Caballero, y la edil de Medio Ambiente, Chus Lago, acudieron ayer a una charla en A Doblada donde anunciaron la extensión de este pionero programa que se puso en marcha en 2011 en colaboración con cuatro asociaciones de la ciudad y cien usuarios. Desde entonces ha pegado un salto importante, llegando a 400 personas a través de las actividades organizadas por los colectivos Anida, Afaga, Alento, Foanpas, Apamp, Aspavi, Aspanaex, Feafes, el colegio Saladino Cortizo y, desde hace unos días, Asperga.

"Es un programa revolucionario de apoyo educativo que además ayudará a crear empleo", destacó el regidor aludiendo a la convocatoria de una bolsa de trabajo para seis personas desempleadas que podrán formarse en el manejo y adiestramiento de perros. Para ello se seleccionarán ejemplares de la protectora municipal y una vez preparados se pondrán a disposición de las familias de niños para los que el contacto con animales esté indicado por los facultativos.

Hasta entonces, las protagonistas del proyecto de refuerzo educativo serán las perras "Mami", "Guida" y "Pintas", que ya tienen experiencia en trabajo con personas mayores, con parálisis cerebral o menores hiperactivos. "Los perros ayudan a relajarse" y despiertan el "entusiasmo" de los participantes, explicaba a FARO sobre el proyecto uno de los educadores.

Los ejercicios pueden ayudar a los niños a relajarse, a asumir nuevos conceptos y a mejorar aspectos para la convivencia con el resto de compañeros. El Concello apuesta por "generalizarlo" debido a los buenos resultados cosechados hasta ahora y el amplio espectro en el que puede ayudar la terapia canina a los niños, sin necesidad de que presenten alguna discapacidad o dificultades de aprendizaje.