María José Bravo Bosch, delegada de la Xunta en Vigo, se desmarcó ayer de la postura del PP local sobre el incremento del canon de la Sociedad Galega de Medio Ambiente (Sogama) y reclamó al Concello que pague la cuota o autogestione el reciclaje de basura en la ciudad. Apenas 24 horas después de que el grupo municipal de su partido apoyase a PSOE y BNG para solicitar a la Xunta que asuma la subida de la tasa en Vigo, la portavoz autonómica convocó una rueda de prensa en la que defendió el aumento como medida necesaria para lograr la viabilidad económica del servicio.

"Creemos que Sogama es la mejor opción y consideramos que un incremento de nueve euros al año no es para echarse las manos a la cabeza", dijo. Bravo Bosch argumentó que la empresa presta un servicio público de tratamiento de residuos sólidos y urbanos a un total de 296 concellos, entre ellos Vigo. "Adscribirse es voluntario por parte de todos los ayuntamientos y se trata de la tarifa más baja de todos los sistemas de gestión de residuos de Galicia y una de las más baratas a nivel estatal", explicó.

La delegada negó que existiera un problema de gestión, pero admitió que existe un problema económico -la nueva regulación energética reducirá en al menos 13 millones de euros la recaudación por la venta de electricidad- y es necesario aumentar el canon para poder financiar el servicio. "Esta subida es responsable y entendemos que se corresponde con la realidad", mantuvo.

María José Bravo insistió en que entendía la situación de crisis económica de los ciudadanos y aseguró que la administración lo comparte "con criterios de austeridad y de reducción de gasto público". En cualquier caso, indicó que el incremento va destinado a sostener el servicio. "Sogama tiene que garantizar la viabilidad de un proyecto tan importante para la sociedad y entendemos que se tiene que hacer este pequeñísimo aumento de nueve euros al año por ciudadano", afirmó. La delegada de la Xunta mencionó que en su época como concejala popular fue rechazada una propuesta para evitar "un catastrazo" que suponía entre 100 y 200 euros al año. "Eso sí es un aumento", dijo.

Esfuerzo municipal

De la misma forma, solicitó el esfuerzo de la administración municipal. "El Concello Vigo presume de sus cuentas saneadas, pero cobra el IBI y el agua sin atenerse a la realidad. ¿Por qué no le pareció mal subir el IBI hace un par de años y ahora se escandaliza de una subida de 9 euros?", preguntó.

Bravo Bosch recomendó al alcalde, Abel Caballero, que abone el canon o busque una alternativa. "Si al alcalde de Vigo no le parece bien que Sogama suba el canon para seguir garantizando los servicios de recogida de residuos en su ciudad, tiene toda la libertad para optar por otro sistema más barato. Yo no soy quién para decidir cuál debe elegir. Repito, Sogama es voluntario, no es un incremento sustancial", insistió antes de reprocharle el cobro de otras tasas. "Si cobrase a los vigueses lo que consumen y nos los 15 metros cúbicos obligatorios cada dos meses, consuman o no, tendría dinero de sobra para no cobrarle nada a ningún vigués y repercutirlo en la subida de Sogama", expuso.

El PP y la responsabilidad

Respecto a la postura de su partido en el pleno, no quiso entrar en el fondo de la cuestión. "Fue una moción en la que lo piden, pero evidentemente cada uno tiene su responsabilidad. Sé perfectamente cómo funciona Sogama y lo que es el presente y futuro. Apoyo totalmente lo que ha decidido a la Xunta. Si fuera una subida excesiva a mí no me dolería en prendas reconocer lo que es correcto, pero aseguro que la subida es imprescindible. La Xunta hace absolutamente lo correcto", remachó.

Bravo Bosch considera que Abel Caballero utiliza la "demagogia" para culpar "de todos los males de Vigo" a la Xunta. "No, no tiene por qué asumir el coste de Sogama, puede montar una planta incineradora fuera", respondió antes de señalar que los 2,2 millones de aumento no es una cantidad "sustancial" para el Concello y puede hacerle frente con una modificación presupuestaria.