La proximidad de unas elecciones desata siempre un furor inversor por parte de las administraciones, hasta el punto de que encontrarse calles en obras empieza ya a ser una señal de que se avecinan comicios. Y los datos lo confirman. En vísperas del 24-M concellos y diputaciones pisaron el acelerador de las inversiones hasta el punto de que dejaron comprometido un 84 por ciento más de gasto en obras que el mismo periodo del pasado año. Las nuevas corporaciones constituidas tras el 24 de mayo se encontrarán así con unos presupuestos con menos margen de maniobra para lo que queda de ejercicio.
El gasto en inversiones fue además el único, junto al capítulo de subvenciones, que se incrementó durante el primer trimestre de este año, puesto que las entidades locales dejaron comprometido menos gasto corriente, financiero y también menos obligaciones de pago para costear las plantillas.
Según los datos de la Federación Gallega de la Construcción, concellos y diputaciones ya duplicaron antes de las elecciones la licitación de obra pública. Sin embargo, no solo sacaron a concurso nuevos proyectos de obras sino que ya dejaron desembolsado o comprometido casi 40 millones de euros en solo tres meses frente a los 21,6 que se gastaron en el mismo periodo de 2014 y eso teniendo en cuenta que, en términos de ejecución presupuestaria, el primer trimestre del año siempre es el más flojo.
Según los datos del Ministerio de Hacienda, los concellos gastaron en obras 22,7 millones de euros a principios de año, 10,3 millones más que en 2014. Las diputaciones no se quedaron atrás y desembolsaron 17 millones, frente a los 9,1 del pasado año.
Todos estos gastos son "obligaciones reconocidas", es decir, la factura ya está emitida y compromete en el pago a la administración local. Sin embargo, no quiere decir que todo esté pagado. De hecho, las entidades locales dejaron casi nueve millones de euros en obras sin abonar en este primer trimestre (un 22,5 por ciento), de los cuales 6,9 millones corresponden a los ayuntamientos y 1,8 millones a las diputaciones. Y esta cantidad es, además, el doble de la que dejaron pendiente de desembolso en el mismo periodo del pasado año. De manera que no solo comprometieron un 84% más de gasto en inversiones sino que además duplicaron las facturas en obras que guardaron en el cajón.
Pero no solo quedaron pagos pendientes en obras. En los tres primeros meses del año la administración local gallega dejó facturas sin abonar por valor de 35,6 millones de euros. Sin embargo, y con la única excepción del capítulo de inversiones, concellos y diputaciones redujeron esta cifra en 2015, puesto que entre enero y marzo de 2014 habían sido más de 44,2 millones de euros.
Además de comprometer más gasto en obra, las entidades locales aumentaron también en casi un 10 por ciento el dinero destinado a transferencias de capital, es decir, ayudas y subvenciones.De 3,1 millones de euros subieron esta partida a 3,4 en el primer trimestre del año.
Por el contrario, redujeron el gasto en el resto de capítulos. Tras años de ajuste presupuestario para acomodarse a las directrices de déficit impuestas desde Hacienda, las corporaciones locales han logrado sanear sus cuentas y reducir sus gastos financieros en un 49 por ciento entre enero y marzo de este año.
Pero también tuvieron menos gastos corrientes, es decir, dedicaron menos dinero a pagar recibos de agua, luz o calefacción, entre otros. De los 149,2 millones de euros que gastaron entre enero y marzo del pasado año, pasaron a 128,3, un 14 por ciento menos.
Y en personal el recorte fue del 11 por ciento. Concellos y diputaciones comprometieron gastos en plantillas en los primeros meses de 2015 por 149,9 millones.
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Los ayuntamientos recaudan un 40% menos en el primer trimestre del año
- Y mientras las entidades locales se volcaban con las obras en el primer trimestre del año, la recaudación de impuestos se desplomó. Los ayuntamientos ingresaron por impuestos un 41 por ciento menos que en el mismo periodo del año anterior.Si entre enero y marzo de 2014 los concellos habían logrado recaudar ya 81,4 millones de euros, a principios de este año esta cifra se desplomó hasta los 47,8 millones de euros, según revelan los datos de ejecución presupuestaria del Ministerio de Hacienda.Tras este descenso está la fuerte caída experimentada en la recaudación de los impuestos que gestionan directamente los ayuntamientos. En vísperas de elecciones, las corporaciones locales solo cobraron 58,8 millones de euros, frente a los 80,3 millones de euros del pasado año.Los tributos indirectos, por el contrario, crecieron ligeramente, pasando de 11,4 millones el pasado año a 13,1 en el primer trimestre de este año.Otra fuente de financiación importante para las entidades locales son las tasas y precios públicos, que también se desplomaron en el primer trimestre. Por este concepto los concellos ingresaron casi un 20 por ciento menos ( 49,3 millones de euros).La diputaciones también recaudaron algo menos que el pasado año, pero la diferencia apenas es significativa. De 10,4 millones ingresados por impuestos directos e indirectos entre enero y marzo de 2014 se ha pasado a 10,2 millones de euros.
