La sangría poblacional de Galicia no se detiene desde el inicio de la crisis y 2013 se cerró de nuevo en números negativos con un saldo vegetativo de -10.560 personas, según los datos reales de nacimientos, defunciones y matrimonios del pasado ejercicio publicados por el Instituto Galego de Estatística (IGE). El año pasado nacieron 19.726 niños en la comunidad -un 16,5% menos que hace un lustro- mientras que las 30.195 defunciones experimentaron una ligera subida del 2% y continúan doblando a los alumbramientos.

El declive demográfico apenas tiene excepciones y el análisis por concellos refleja hasta qué punto llega esta situación, ya que en 300 ayuntamientos gallegos mueren más personas de las que nacen.

Solo catorce concellos logran un resultado positivo al contar con más alumbramientos que defunciones. En Pontevedra se incluyen en este grupo la capital de la provincia, además de Ponteareas, O Porriño, Salceda de Caselas y Soutomaior. La mitad de los municipios con más nacimientos que que fallecimientos está en la provincia de A Coruña. Ames ganó 176 habitantes en 2013 y cuenta con los mejores datos de toda Galicia y a este concello se suma Arteixo, Cambre, Culleredo y Sada, junto con Corcubión y Brión. Completan la lista Burela, en Lugo, y Barbadás, en Ourense.

Entre las ciudades, Pontevedra es la única que incrementó su población con un saldo positivo de 88 habitantes frente a la pérdida o el estancamiento de las otras seis grandes urbes: A Coruña (-393), Ferrol (-435), Santiago (-53), Ourense (-208), Lugo (-69) y Vigo, que presenta el peor balance con 1.200 muertes más que nacimientos.

Por provincias, la coruñesa es la peor parada porque los 8.449 nacimientos de 2013 no compensan las 12.086 muertes y arrojan una pérdida de población de 3.600 habitantes. La tendencia se repite en Lugo y Ourense donde esa diferencia llega a los 2.817 y 2.629 casos. La provincia pontevedresa tampoco se escapa de la sangría demográfica pero en menor medida, con un balance negativo de 1.457 vecinos.

En medio centenar de ayuntamientos -el 15% del total- el saldo demográfico negativo supera los 100 habitantes. Además de las ciudades de Vigo, A Coruña, Ferrol y Ourense, en ese grupo se encuentran municipios como Viveiro, Vilalba, Monforte, A Estrada, Chantada, Castro Rei o Silleda.

La caída de la natalidad es una de las principales causas que describe la situación actual. Antes de la crisis, la natalidad había empezado a repuntar y crecía año tras año. Pero desde 2008 con el aumento del paro y la inestabilidad laboral las parejas aparcaron sus planes para aumentar la familia. En números absolutos, A Coruña y Pontevedra, con 8.449 y 7.332 casos concentran la mayoría de nacimientos de la comunidad frente a los 2.083 registrados en Lugo y los 1.862 en Ourense. Pero en todas las provincias nacieron menos niños respecto a hace cinco años.

El descenso más acusado se produce en Pontevedra con un 18% menos, seguida de la bajada del 14% en A Coruña y Ourense, y el 6,7% en Ourense. En tres de cada diez ayuntamientos gallegos -un total de 135- hubo menos de una decena de bebés que vinieron al mundo el año pasado y de ese total el 83% están en la provincia ourensana. Incluso en una docena de concellos no nació ningún niño en 2013. Se trata de Vilasantar (A Coruña), Folgoso (Lugo) y Dozón (Pontevedra), a los que se les unen nueve municipios ourensanos: Beariz, Punxín, Vilar de Barrio, Montederramo, A Teixeira, Gomesende, Quintela de Leirado, Verea y San Xoán de Río. La otra cara de la moneda está en una treintena de ayuntamientos donde el número de nacimientos está por encima del centenar. Los alumbramientos se concentran en las ciudades -con A Coruña y Vigo a la cabeza con 1.978 y 2.390 casos respectivamente- pero destacan también otros concellos como Ames, Narón o Vilagarcía.

Fallecimientos

Junto con la reducción del número de alumbramientos, las defunciones se mantienen estables en torno a las 30.000 anuales. Solo en Ourense bajaron las muertes respecto a 2008, en concreto en un 4,5% al pasar de 4.706 a 4.478. Mientras que en Lugo la cifra se mantiene estable en el último lustro en los 4.870 decesos, en A Coruña y Pontevedra -con 12.086 y 8.754 casos respectivamente- la subida ronda en ambas provincias el 4%, por encima del aumento del 2% a nivel autonómico.

El número de fallecimientos supera el centenar en 68 concellos, casi la cuarta parte de toda Galicia. Y de nuevo las ciudades por volumen de población están en los primeros puestos, en concreto, A Coruña con 2.365 defunciones el año pasado.

En los últimos cinco años también se ha reducido el número de matrimonios. Los 8.102 enlaces de 2013 suponen un 25% menos que las 10.867 parejas que se casaron en el año 2008.