Hasta julio de 1972 hay que remontarse para escribir la historia de Sodiga, con la que la Xunta toma participaciones temporales en el accionariado de una empresa o incluso suscribe préstamos participativos para apoyar su crecimiento y "añadirle credibilidad". Una sociedad anónima convencional al principio, "para el Desarrollo Industrial de Galicia", y que a partir de 1998 adoptó la fórmula del capital riesgo, con la vista puesta en compañías que no coticen en ningún mercado bursátil y sirvan de "consolidación" al tejido productivo de la comunidad. Sodiga sirvió de pulmón para una larga lista de proyectos durante los años de bonanza, pero hoy, a la salida de la segunda recesión de la economía, sufre, como un socio más, la embestida de los números rojos, que superaron 6,2 millones en 2010, alrededor de 4,7 millones en 2011 y que el pasado ejercicio se triplicaron, hasta casi 13 millones de euros, según consta en el informe anual enviado al Registro Mercantil, que eleva a 52,761 millones el total de pérdidas acumuladas.--- NO TOCAR ---

----------------

Siga leyendo la noticia en Orbyt, o suscríbase a Faro de Vigo y tenga acceso completo a todas nuestras noticias sin límites.