El BNG salió ayer a la calle para exigir que se frene “el proceso de privatización” de las cajas de ahorro que “pondrá fin a 169 años de historia” de este modelo de entidad. Los nacionalistas responsabilizan tanto al Gobierno de Zapatero como al PP de Mariano Rajoy y Alberto Núñez Feijóo.

El Bloque, junto al sindicato CIG, Galiza Nova y asociaciones simpatizantes, celebraron una manifestación que reunió en la plaza de A Quintana de Santiago a unas 5.000 personas, según la organización, bajo el lema Galicia ten dereito, en defensa do aforro, o emprego e o país, a la que asistió la primera plana de la formación, con su portavoz nacional Guillerme Vázquez a la cabeza.

Fue, sin embargo, el economista Xabier Vence el encargado de leer un manifiesto en el que se censuró la reforma del sistema financiero plasmada en la aprobación del real decreto que fija los nuevos requisitos de capitalización para las cajas y que, en opinión del BNG, “discriminan” a Novacaixagalicia. De hecho, para Vence es una “nueva vuelta de tuerca” gestionada por “la gran banca”, que impone unos “requisitos discriminatorios para forzar la desaparición de las cajas”.

La abstención del PP

Vence cargó contra Zapatero por abrir la puerta a la entrada de capital en la entidad ajeno a los intereses de la comunidad, pero también contra el presidente de la Xunta, que “sacrificó los intereses gallegos” para beneficiar al PP, que se abstuvo en la votación de la reforma legal “de manera cómplice”. “Galicia no puede abstenerse, está en juego la supervivencia del tejido productivo”, clamó Vence antes de pedir a Feijóo que presente un recurso de inconstitucionalidad contra el real decreto para intentar “salvar la caja”.

Durante la manifestación se escucharon consignas contra socialistas y populares y gritos para que la caja mantenga su centro de decisión en Galicia y nutra de financiación al tejido productivo gallego, “castigado” por la crisis y por las decisiones de Moncloa. “Gobierno y Xunta tienen que rectificar unas políticas económicas tremendas con unas consecuencias inaceptables”, exigió Guillerme Vázquez antes del inicio de la marcha.

Al Ejecutivo de Zapatero se le reprochó la aprobación del decreto del carbón o la escasa defensa de los recortes de hasta el 95% en las cuotas de pesca, que afectan al sector gallego. A la Xunta se le pidió que ejerciese sus competencias para “salvar” a la entidad, en peligro por un enemigo compartido. “¿La culpa de quién es? Del PSOE y del PP”, gritaban los manifestantes. “Caja gallega, no hay que perderla”, añadían después.

Al acto asistieron los diputados del BNG Carlos Aymerich, Ana Pontón, Teresa Táboas, Ana Luísa Bouza, Alfredo Suárez Canal o el líder de la UPG, Francisco Rodríguez, entre otros.