El rendimiento neto de los trabajadores autónomos gallegos -el dinero limpio que obtienen a fin de año- se sitúa, de media, en los 6.332,32 euros anuales. Según la última estadística tributaria, la mayor parte de los 122.382 empleados por cuenta propia (el 22,27%) apenas se quedan con 4.943,09 euros a final de ejercicio. O así lo declaran al Fisco. Con estas cifras el resultado es que, cuando toca el momento de jubilarse, los empleados autónomos perciben una pensión pírrica, inferior al Salario Mínimo Interprofesional (SMI) o a las pagas que, de media, ingresan los perceptores de pensiones de viudedad. Tal y como consta en los registros de la Seguridad Social, apenas 19 de cada 100 autónomos ya jubilados sí ingresan, al menos, más de esos 648,6 euros que fijó el actual Gobierno como el mínimo a percibir en un puesto de trabajo a jornada completa para 2015. El resto tiene que arreglarse con una paga de 592,99 euros mensuales.
El número de perceptores de una jubilación por régimen de autónomos asciende en Galicia a 184.382 personas, según los datos a cierre de julio. En toda España son 1.249.996 y, como es habitual, los ingresos medios estatales están por encima de los gallegos. De media en el conjunto de todas las comunidades la paga es de 689,53 euros al mes. En los últimos diez años las pensiones, tanto las que se abonan a los autónomos jubilados gallegos como al los del resto de España, se han revalorizado un 28%. Con todo continúan por debajo de las de jubilación por régimen general (1.039,33 euros) que se pagan en Galicia, e incluso se ven superadas por de las de viudedad (605,67 euros al mes) y las de incapacidad permanente (852,65 euros). Solo son más elevadas que las de orfandad (356,61 euros) y las pensiones de favor familiar (510,68 euros mensuales).
Si se extrapola lo que perciben cada mes los autónomos retirados en Galicia al conjunto del año, y teniendo en cuenta las catorce pagas en las que se distribuyen las pensiones, estos trabajadores ingresan anualmente una media de 8.301 euros y, por tanto, ocupan uno de los escalones más bajos en cuestión de remuneración salarial. Si cotizasen por IRPF -a modo de simulación-, ganarían menos que los 209.920 contribuyentes que declaran a Hacienda ingresos de entre 1.500 y 6.000 euros cada ejercicio.
